Fin de temporada a las puertas, ya casi a mi alcance… y recibo una proposición!!! Y cómo decir que no a la oportunidad de vivir una aventura con las más locas del pelotón femenino?? Jajaja. Llegaba a Galicia un nuevo formato de prueba, una carrera por relevos que nos haría recorrer la provincia de Pontevedra y sus picos más altos; la Epic Race Pontevedra! Y las Btteiras GV, equipo femenino compuesto por Lara Lois, Silvia García, Diana Blanco y una servidora, estábamos dispuestas a sufrir sus 550 kms y a disfrutar de cada segundo.
Casi sin tiempo para concienciarme, tocaba preparar la maleta para enfrentar este nuevo reto; importante llevar todo lo esencial, y algo más, por si acaso! Jeje. El viernes me levanto a las 5:30 para trabajar, dejando todo preparado para arrancar directamente hacia Pontevedra, donde comenzaría nuestra aventura a las 17.
Llego a tiempo para asistir al brieffing informativo junto a mis compañeras, y aquí empiezan las risas y los nervios previos a la salida. Una pena la escasa participación, que nos hizo echar de menos la compañía durante las etapas y en los puntos de relevo.
1ª Etapa: Pontevedra – Redondela
La primera etapa corre a cargo de Lara, el cohete humano, que arranca desde Pontevedra a toda pastilla rumbo a Redondela. Tras acompañarla durante varios kms, le deseamos la mejor de las suertes y nos trasladamos al primer punto de relevo.
Esta primera parte alterna zonas rodadoras con alguna subida exigente, aunque la mayor parte no ofrece grandes dificultades técnicas. Desde luego, nada que pueda resistirse a las portentosas piernas de Lara, que completa la etapa en unas 3 horas y con la mejor de las sonrisas.
Llega el turno de Diana, la más valiente del grupo, que tendrá que afrontar 80 kms, prácticamente nocturnos, para alcanzar el siguiente destino, en la localidad de Tui.
Esta etapa está marcada por dos duras ascensiones, la primera sin demasiadas complicaciones, aunque se va subiendo gradualmente durante varios kms. La segunda, un poco más imponente, el ascenso a la Groba, por caminos técnicos y de gran exigencia física. La niebla es la protagonista durante la noche, obligando a controlar la velocidad para no tener una caída o desviarse del trazado. Aunque nuestra campeona no se viene abajo en ningún momento y, combinando sus energías con su olfato para la orientación, llega a Tui sin grandes dificultades y con ganas de más marcha.
3ª Etapa: Tui – A Lama
Con nervios de acero, toma el relevo mi tocaya Silvia G., con algunos temores en cuanto a pedalear por la noche y en modo navegación… Le deseamos suerte, mientras parte a las tantas a la conquista de esta tercera etapa. La primera parte divertida, por zonas ratoneras a orillas del río Miño, para luego seguir rodando por caminos cómodos hacia el inicio de la primera ascensión. Esta subida se muestra exigente durante los primeros kms, pero pronto suaviza para permitir disfrutar de un recorrido de 10.
Tras un rápido descenso, llega la subida al Suido, exigente por sus casi 1000 metros de altitud, pero ya es el último esfuerzo antes de lanzarse cuesta abajo hacia el concello de A Lama, donde Lara espera impaciente su próximo turno.
4ª Etapa: A Lama – Pontevedra
Dado que la rubia tiene más compromisos que un ministro, decidimos darle dos de las primeras etapas, para que pueda llegar a tiempo al evento que tiene para esta misma tarde, ni más ni menos que una boda. Así que toca apretar en esta etapa para llegar a tiempo a la pelu y pasar por una metamorfosis digna de Cámbiame… jeje.
Etapa corta, de unos 50 kms, y perfil rompepiernas por un trazado técnico y divertido. El recorrido ofrece bajadas entretenidas donde disfrutar a lo grande, y el ascenso a la Fracha en compañía de unas maravillosas vistas al mar.
Lara consigue mantener una buena posición en la general, aunque un pequeño fallo en el track provoca una pérdida importante en los últimos kms, que obliga a la mayoría de participantes a tomar un desvío por carretera para llegar a Pontevedra.
Llega mi turno, después de muchas horas esperando, y los nervios durante la espera van incrementándose a pasos agigantados. Me espera una etapa de algo más de 60 kms, con dos ascensos importantes, y me atemoriza perderme durante la navegación.
En cuanto Lara me pasa el relevo, arranco con fuerza animada por mis compañeras, con el corazón a mil y con muchas ganas de hacerlo bien. Primera parte callejeando por Pontevedra antes de entrar en el paseo y dirigirme a la subida del Monte Castrove. Los primeros kms no ofrecen gran dificultad, pero al dejar el asfalto las pulsaciones se van por las nubes y siento las piernas cargadas, incluso con avisos de calambres. Trato de mantener un ritmo estable, y consigo recuperar sensaciones.
Contenta, sobre todo por no perderme, corono el Castrove con unas vistas preciosas, y me lanzo hacia abajo tratando de ganar algo de tiempo. Bajada rápida y fácil, donde es importante mantener un ojo en el Garmin, para evitar tomar el camino equivocado.
Después de un tramo divertido a orillas de un arroyo, toca navegar por varios pueblos para ir acercándome al siguiente Pico, el Monte Xiabre. Esta subida presenta alguna pequeña complicación en el inicio, con un tramo de sendero estrecho cubierto por la maleza, que me obliga a echar pie a tierra. Pero pronto retomo la marcha para continuar la subida a ritmo estable.
La bajada ofrece algunos tramos técnicos, donde la concentración es primordial, y nos lleva a Caldas accediendo por carretera. Solo falta luchar con los últimos repechos verticales antes de llegar a mi destino, Moraña. Aunque en un principio hablamos de llamarnos cuando estuviéramos cerca para preparar los relevos, se me olvida completamente, y entro en meta sin tener a quien pasar el testigo… jajaja.
Tan solo un minuto después ya está Diana preparada, esta vez para enfrentar una dura etapa de 80 kms con varias subidas de aúpa!!!
6ª Etapa: Moraña – Vilade Cruces
Le toca a Diana sufrir la etapa más dura de la prueba, con un desnivel acumulado muy exigente, capaz de acabar con el biker más duro. Aunque la de Laza es atrevida y arranca con la misma emoción que si se tratase de un paseo. A los pocos kms, empieza la subida al monte Xesteiras, donde la exigencia física es importante, sumada a algunos tramos de piedra suelta donde el equilibrio forma parte del juego.
Descenso rápido con zonas de terreno suelto y tramos de hierba, donde la diversión está asegurada, para luego rodar un rato entre aldeas, antes de trepar al siguiente pico, el Monte Cabalar. Sin grandes desniveles, su ascenso se complica por ser técnico de principio a fin, aunque compensa la bajada, rápida y divertida.
Y casi sin tiempo para tomar aliento, llega el último pico, el más alto de la jornada, aunque todavía quedarían algunos kms de repechos exigentes, donde sufrir a tope! Y la noche va cayendo mientras Diana completa los últimos kms, y se acerca a Vila de Cruces para pasarme el relevo.
7ª Etapa: Vila de Cruces – Cerdedo
Otra vez en la línea de salida, casi sin horas de descanso entre etapas, y más de 90 kms por delante… y todo esto, a oscuras!!! La tensión es evidente, y el temor a quedarme sin luz es un punto más contra el que luchar. Arranco en solitario, alternando asfalto con caminos de tierra, al principio rodadores, pero pronto empiezan a inclinar y frenan mi marcha. En estos puntos donde la velocidad es mínima es donde la cabeza empieza a dar vueltas y los ruidos alrededor se incrementan, hasta el punto de plantearse: ¿Qué demonios pinto aquí? Jajaja. Pero hay que seguir adelante, el equipo me necesita, y no es momento de lloriqueos.
Las continuas subidas y bajadas que vienen a continuación hacen que las piernas vayan quemando, a pesar del frío nocturno, que se hace más presente una vez que llegamos a la zona del Candán, en tierras lalinenses. Empiezo a ascender de forma continuada por caminos de piedra e hierba, los cuales van mermando mis fuerzas, y me hacen olvidar por un momento los peligros de la oscuridad, incluso cuando dos perros enormes salen al camino amenazantes… En este punto, agradezco cualquier zona rápida donde ir sumando kms, pues es una etapa larga y el cansancio acumulado empieza a hacer efecto.
Cuál es mi sorpresa cuando, alrededor del km 70, el garmin marca un desvío; doy marcha atrás y no encuentro otro camino posible, así que vuelvo a avanzar en la dirección del principio. Después de dar unas cuantas vueltas adelante y atrás, me encuentro de frente con el resto de participantes que van por delante; un error en el track hacía un recto imposible de comunicar con el resto de la ruta. Debido a este percance, la organización decide dar por nula la etapa y venir a por nosotros, a fin de evitar males mayores.
Casi en estado de congelación mientras esperamos, nos dedicamos a contar historias y sacarnos unos selfies para recordar este día… jeje. Cuando llegamos a Cerdedo, son las 4 de la mañana y el frío en esta localidad nos deja sin aliento.
Me encuentro con una Lara fiestera, todavía maquillada, que decide acompañar a Silvia en esta última etapa, aunque tendrán que esperar un par de horas para respetar el orden de salida. Me voy corriendo a la ducha, donde el agua abrasa de tal forma que es imposible aguantar debajo, por lo que me aseo como puedo y me meto en el coche a dormir un ratillo, tratando de entrar en calor.
8ª Etapa: Cerdedo – Pontevedra
Y llega la definitiva, la etapa que nos hará finishers, y para ello contamos con las prodigiosas piernas de Silvia y Lara, dos máquinas sobre la bici y fuera de ella. En cuanto arrancan, nos desplazamos ya al punto final, para tratar de descansar algo antes de completar los últimos kms las cuatro juntas.
Tan pronto aparco el coche, me quedo profundamente dormida, hasta que a las 9 recibimos la llamada informando de que les faltan unos 10 kms. Nos vestimos y arrancamos a su encuentro, listas para hacer historia en la primera edición de la Epic, entrando en meta con menos de 39 horas y con la satisfacción de haber completado este gran reto!
Formato de aventura 100% recomendable, donde se engloban las capacidades personales en carrera junto con el trabajo en equipo, para demostrar que la unión hace la fuerza. Doy mi enhorabuena a la organización por todo el trabajo realizado, a pesar de los pequeños fallos, que supieron subsanar de la mejor forma; la próxima seguro que sale todo a la perfección y yo espero estar allí para verlo y vivirlo!
Muy feliz de compartirlo con estas grandes amigas, que me han regalado un finde inolvidable, habrá que repetirlo!!! Felicidades a los ganadores y resto de participantes que consiguieron superar semejante hazaña, y espero que en próximas ediciones la participación aumente y haga más grande esta prueba. Y felicidades y gracias de corazón al equipo Gobik GV Sports, compañeros y amigos, por la ayuda prestada y esas risas en grupo!
Se acaba una temporada llena de grandes momentos, de grandes personas, de grandes emociones… Aunque nada de lo vivido sería posible sin la ayuda de esas marcas que me apoyan e impulsan mis mayores deseos. Gracias BH Bikes, Iberobike, Atika Sport Garments, Spiuk, CaLCeToS!!!