La crisis de los tulipanes, el crack del 29, las punto com, o la más reciente, la crisis de las hipotecas, o mejor dicho, los bancos, parece que se pueden quedar cortas a la explosión de la burbuja de las bicicletas.
Pero no nos alarmemos antes de tiempo, el boom actual de la bicicleta, pese a que es mundial, no supone un gran riesgo para la economía mundial, aunque si para las empresas del sector.
Esto quiere decir, desde el fabricante, pasando por los grupos inversores dueños de las marcas, las propias marcas en sí, distribuidores, tiendas, e intermediarios varios.
El dinero fresco, cuando es poco no huele, pero almacenado en grandes cantidades, el olor llega a miles de kilómetros
Son muchos los actores que intervienen en la cadena de la bicicleta, desde el que tiene la idea o pone el dinero, hasta el propio ciclista que compra la bici.
Gracias a las bicicletas eléctricas y la gran demanda de ciclos, la salud actual del sector es muy buena, y esto ha atraído a los de siempre, «los buitres de Wall Street» (o llámalos como mejor te guste).
Las inversiones son buenas, no nos equivoquemos.
Sin personas que arriesgan su dinero para innovar, crear y avanzar, estaríamos aún con la mountain bike del Pryca o la Motoretta.
Suben los precios, aumentan las ventas y se comienza a fabricar sin parar
En los dos últimos años, el que no se ha despistado mucho, ha conseguido mejorar los números de los anteriores ejercicios. Números que ya eran de por si buenos.
Esto ha hecho ver la oportunidad de negocio a los que tenían algo de «cash» guardado esperando el momento oportuno.
Si nos sigues desde hace tiempo o cualquier otro medio del sector, habrás notado el baile de dueños, directivos, fábricas y sedes de muchas de las grandes marcas de bicicletas del mundo.
Solo has de buscar el «tag Industria» en nuestra web para ver infinidad de ejemplos.
No es casualidad. Allá donde se fabrican billetes más rápido que en otros lugares, allí invierten sus ahorros.
Pocas marcas quedan ya que no pertenezcan a algún gran grupo inversor, y esto es un gran riesgo si la burbuja explota, incluso si se deshincha lentamente.
¿Qué pasará cuando la burbuja de la bicicleta explote?
Si trabajas en el sector de la bicicleta, seguramente la onda expansiva no solo te llegue, puede incluso que incluso te explote en la cara.
Cuando esto ocurra, el flujo de atraer dinero actual al sector ciclismo, será el contrario.
Los billetes volarán, y en muchos casos desaparecerán para siempre.
Hablando sin metáforas, si ponemos el ejemplo de Pon Holdings, dueño de marcas como Cerveló, Santa Cruz, Cannondale, GT Bicyces o BBB Cycling entre otras muchas, además de infinidad de conglomerados de otras grandes empresas, ¿qué ocurrirá?.
No siendo experto ni mucho menos, pero cuando un gran grupo inversor con marcas tan gigantescas como las mencionadas, lo primero que llegará es la fuga de capitales de los inversores.
Quienes pusieron el dinero, huirán como ratas cuando las gráficas comiencen a mostrar lo que nadie quiere ver.
El siguiente paso será que los dueños de los grupos inversores y de las propias marcas, comenzarán a recortar gastos todo lo posible para no caer a números rojos y seguir generando beneficios.
Si la cuerda se tensa demasiado, tocará elegir donde poner las mejores vendas y medicinas, dejando morir a los que ya andan demasiado moribundos.
Al ciclista o el cliente final, le tocará lo de siempre, pagar más. Pero a eso ya nos hemos acostumbrado, ¿no?.
Como siempre, esto es una opinión personal a groso modo, las cosas son mucho más complicadas de como yo las cuento, y cada fabricante es un mundo.
El problema principal, explote o no la burbuja de la bicicleta, es que si hay cuatro grandes dueños de la mayoría de grandes marcas ciclistas, si pincha un o dos de ellos…
