La sombra del dopaje en el ciclismo profesional, como en otros muchos deportes, es una lacra difícil de erradicar.
El silencio reina muchas veces en el pelotón internacional, y eso no es más que un indicativo de que algunos corredores, equipos, y personal de los mismos, prefieren no opinar…
Cada mes salen nuevos casos de algún tipo de dopaje, algunos puntuales, y otros de gran escala.
El equipo portugués W52-FC Porto investigado por la policía
La última operación a gran escala que ha salido a la luz ocurrió el pasado fin de semana en Portugal.
Corredores, técnicos y todo lo que rodea a los mismos, como coches de equipo, instalaciones y domicilios de los integrante del W52-FC Porto, fueron registrados.
El motivo del registro, según indica el comunicado de la propia policía lusa, era el de «detección de métodos prohibidos y sustancias ilícitas susceptibles de adulterar la verdad deportiva en las pruebas de ciclismo profesional«.
Hasta 120 policías han participado en este registro masivo junto a la Agencia Antidopaje de Portugal.
Dos detenidos y diversas sustancias incautadas al W52-FC Porto
Tras el registro, en el que se buscaban tanto sustancias dopantes como elementos para administrar las mismas, se efectuaron dos detenciones.
En los registros, también se encontraron, según los agentes, «varias sustancias e instrumentos clínicos utilizados en el entrenamiento de los atletas y con impacto en su rendimiento deportivo«.
Este domingo, el equipo ciclista profesional de categoría continental W52-FC Porto, iba a tomar la salida en el Gran Premio O Jogo, pero los registros y las detenciones lo impidieron.
En principio, parece que entre los dos detenidos por dopaje no se encuentra ninguno de los ciclistas del W52-FC Porto.
