¿Se atrevería Peter Sagan a firmar su libro autobiográfico mientras sube en su bicicleta de carretera el puerto del Tourmalet del Tour de Francia?.
Pues la respuesta es que si se ha atrevido y ni si quiera se ha bajado de la bici para firmarlo, lo ha firmado sobre el manillar y en marcha.
Este aficionado seguro que se ha llevado el mejor regalo de su vida de uno de sus ídolos ciclistas, Peter Sagan, quién no se ha cortado ni un pelo cuando el espectador se ha puesto a correr al lado suyo mientras ascendía el mítico puerto con su biografía y un rotulador en la mano.
Sagan se lo ha cogido, lo ha apoyado sobre su manillar y lo ha firmado y devuelto al aficionado. También le han ofrecido una lata de cerveza, y aunque seguro que eso le apetecía más no se ha atrevido a aceptarla.
Ya le hemos visto en este Tour de Francia haciendo algunas de sus virguerías sobre la bici, como el caballito a una mano con la bicicleta de contrarreloj o girando la rueda trasera frente a otro aficionado.