Épica decimo octava etapa en el Giro de Italia 2020 que ha estado marcada por el coloso del Stelvio.
Pese a que Jakob Fuglsang se atrevió a intentar sentenciar la carrera, las rampas de este coloso fueron las que decidieron quienes iban a poder pasar su cima los primeros. El Stelvio marcó quienes están más fuertes en esta recta final de un accidentado Giro de Italia.
Almeida, que partía con ventaja, no pudo administrarla, y llegó a perder en la línea de meta casi cinco minutos respecto al vencedor de la etapa Jai Hindley.
Más aún perdió Nibali de lo que había perdido en este Giro, llegando junto a Almeida a 04:51 de Hindley.
Hindley, con la gran actuación de hoy y su regularidad, sube directo al segundo puesto de la general, quedando a tan solo 12 segundos del nuevo maillot rosa, Wilco Kerlderman.
Pero no es el único que tiene a tiro de piedra la maglia rosa. Codo con codo, el ciclista del Ineos Tao Geoghegan, entraba en meta junto a Hindley con un tiempo de 6 horas, tres minutos y tres segundos, que sumado a la bonificación, se queda a 15 segundos del primer cajón y a tan solo 3 del neerlandés.
Pero aún ha dado para más esta brillante etapa del Giro de Italia, tan brillante como la actuación de Pello Bilbao, que en solitario ha tirado en los últimos compases de la etapa para entrar en meta a tan solo 46 segundos de Hindley.
Pello Bilbao ha querido agradecer la ayuda prestada en el día de hoy a su compañero Domen Novak:
«Estoy muy agradecido a Domen Novak, quien me ha salvado la etapa. No tengo palabras para él, le doy mil gracias. Mi equipo cree en mí y eso me motiva especialmente»
Pello Bilbao
Bilbao cree que aún queda tiempo de mejorar su posición: «Fue una carrera extrema, pero pude mantener un buen ritmo. Estoy agotado, pero todavía muy motivado. Queda carrera»
Su gran actuación le acerca aún más al podio del Giro, que ahora le queda a poco más de un minuto.
Buonanotte dal Giro d’Italia ❤️
— Giro d’Italia (@giroditalia) October 22, 2020
Powered by @ENIT_italia #Giro pic.twitter.com/xPo19DnQxn
Todo puede ocurrir de aquí al Domingo, aún quedan tres etapas, una llana de casi 260 kilómetros de mañana viernes, otra de montaña con final en alto, en la que tendrán que ascender el Sestriere hasta en tres ocasiones y por dos vertientes diferentes debido al cambio de recorrido de última hora, y la contrarreloj final del Domingo, que aunque son solo 16 kilómetros, puede decidir quién se sube a lo más alto en Milán.