Normalmente en las grandes vueltas ciclistas, los esprínteres (sí, según la RAE, el plural de esprínter ese ese), suelen gozar de una primera semana «de calma» antes de la llegada de los grandes puertos de montaña.
Últimamente no es así. El claro ejemplo lo estamos viendo en el presente Giro de Italia 2022.
En apenas siete días, dos son las etapas con grandes puertos que han tenido que afrontar, una de ellas ascendiendo el famoso volcán Etna.
Hoy domingo, el Giro termina en alto tras afrontar antes otros 4 puertos de montaña
La montaña, no solo es un suplicio para los esprínteres y los rodadores.
Aunque pasarla la pueden pasar más o menos sufriendo sobre la bicicleta de carretera, el problema no es solo llegar a meta.
El mayor problema de los esprínteres, es llegar a tiempo a la meta, es decir, dentro del tiempo de control.
El ritmo que marcan los hombre de cabeza, normalmente escaladores, es bastante inferior al de ellos.
Caleb Ewan
Caleb Ewan se hacía eco hoy antes de la novena etapa del Giro de Italia.
Esta tiene un recorrido de 191 kilómetros, con un puerto de tercera categoría, dos de segunda y dos de primera, el último de ellos con la meta en la cima.
This is what a sprinters nightmare looks like🫣 pic.twitter.com/XDJZ3bfzlR
— Caleb Ewan (@CalebEwan) May 15, 2022
Una etapa para los escaladores donde los velocistas no tienen oportunidad alguna, y su único interés, es gastar la menor energía posible y llegar a tiempo a la meta para no ser descalificados.
Recuerda que desde ya mismo puedes ver la etapa en directo desde aquí:
¿Aguantará la maglia rosa el español Juanpe López?