Alberto Contador analizó hoy la séptima etapa del Tour diciendo que el final “no era bueno para mí”, y añadió que algo parecido sucederá mañana. “Quizás también la última subida es demasiado corta y explosiva, es mejor para corredores como Valverde o incluso Nibali, pero estaremos allí, a la espera de la del lunes, que igual es más idónea”, dijo el líder del Tinkoff-Saxo.
Alberto habló un día más del peligro de estos finales y que lo mejor es estar en cabeza. “Es mucho más sencillo ir detrás, pero ahí estás vendido aunque ahorres algo de fuerzas, pero a costa de tener una caída y echar al traste todo el año. Por eso hay que estar delante y para eso tengo un equipo que me arropa de una forma increíble. Ya llegará la montaña para ver cuál es mi estado de forma”.
Contador dijo que desde fuera “parece que se va despacio y sin tensión, pero es increíble la velocidad, vamos todos a la par, pero como en una contra reloj por equipos, a 50 km/h. Son días de mucho desgaste”, aseguró.
En cuanto a la posibilidad de atacar en los Vosgos, dijo que la montaña “empieza en realidad el lunes, mañana será un final explosivo, mejor para otro tipo de corredores. Nosotros vamos a hacer nuestra carrera, porque todavía queda muchísimo. Hay terreno para aburrir y para recuperar tiempo, los Alpes harán mella, aunque el juez del Tour serán los Pirineos. La gente se va a divertir en la televisión”, concluyó.
