Cada día vemos y sentimos en nuestras propias carnes como algunos conductores no respetan la distancia de seguridad al adelantar a los ciclistas.
Esta es la conocida norma de 1m50, pero va más allá de dejar metro y medio de distancia lateral al sobrepasar una persona que pedalea en bici por la carretera.
Como la gran mayoría sabemos, un vehículo a motor puede adelantar a un ciclista o grupo de ciclistas rebasando la línea continua si es necesario.
Para poder realizar esta maniobra, lógicamente a de ser segura tanto para el coche, moto o camión, como para el ciclista.
Si no está clara la maniobra, nunca se debe intentar. Más vale esperar unos segundos a que lo veamos más claro que poner en peligro nuestra vida, la del ciclista y la del resto de vehículos de la vía.
Pero la norma del metro cincuenta va más allá aún. Tanto si hay linea continua, como si es discontinua, o mejor aún ni si quiera hay línea divisoria, nunca, bajo ningún concepto, se puede adelantar a un ciclista si de frente viene otro vehículo, otro ciclista e incluso un peatón.
Bien, esto deberían de enseñarlo en primero de autoescuela, entre otras normas básicas.
¿Pero que pasa si nos encontramos con un coche de autoescuela, normalmente conducido por alguien que trabaja en ella, y que seguramente sea profesor de la misma, y realiza esta maniobra totalmente innecesaria, arriesgada y fuera de la ley?
Coche de autoescuela (sin alumno) realizando este adelantamiento 🚘↔️🚴 🤦🏻♂️🤦🏻♂️🤷🏻♂️🤷🏻♂️🤷🏻♂️
— RAMACABICI (@ramacabici) February 17, 2020
Siento curiosidad por saber que le dice a los alumnos en prácticas cuando se encuentran a un ciclista en la carretera.
Que sea justo al paso por esa señal 🚘↔️🚴 lo convierte en aun más surrealista pic.twitter.com/9Oh9tzjyOV
Como verás en el vídeo, puede que haya respetado el 1m50 de distancia lateral con el ciclista, pero se ha saltado a la torera todas y cada una de las demás normas de circulación para adelantar ya no solo a un ciclista, sino a cualquier vehículo.
Está en una curva con poca visibilidad, viene varios coches de frente, y para más inri, todo sucede bajo una señal vertical de aviso de cómo adelantar a los ciclistas.
Si el que conduce el coche de la autoescuela es el profesor de la misma, no nos queremos imaginar como estará enseñando a sus alumnos.
