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Vídeo: El peligro de realizar el «Afilador» con la bicicleta

Captura: masterofany

Cuando se monta en bicicleta dentro de un pelotón, uno de los mayores peligros al que nos enfrentamos los ciclistas es el de hacer el afilador.

Para el que no lo sepa, realizar el afilador dentro del argot ciclista significa que la rueda delantera de nuestra bicicleta toque la rueda trasera del ciclista que nos precede como si afilásemos un cuchillo.

Para el ciclista de delante el contacto es casi inapreciable, simplemente notará un leve toque en su rueda trasera y quizás se le frene un poco la bicicleta, pero sin mayores consecuencias.

Pero para el ciclista que da con la rueda delantera las consecuencias son desastrosas.

La bicicleta se desestabiliza completamente, perdemos el control absoluto de la trayectoria y en la mayoría de los casos se terminamos en el suelo.

Esto es lo que le pasa al ciclista del vídeo que puedes ver más abajo, se va al suelo de una forma muy fea dando incluso un duro cabezazo contra el asfalto. Por suerte lleva el casco puesto.

El problema ha sido que el ciclista circulaba de forma incorrecta dentro del pelotón. Siempre que se vaya con alguien delante tuya es fundamental tener la mano cerca de los frenos.

No se debe ir con la manos en el centro del manillar, dado que en caso de imprevisto no nos dará tiempo a frenar y controlar la bicicleta.

Este ciclista no solo lleva la mano lejos del frenos, sino que además suelta una de ellas para señalar el giro.

Al mirar pierde totalmente la referencia del ciclista que lleva delante e impacta con su rueda y una sola mano en el manillar, lo que provoca que le sea totalmente imposible controlar la bici.

La situación que se origina tras hacer un afilador es realmente peligrosa, no solo por la montonera que se puede formar, sino que al circular con tráfico abierto si un coche va a nuestro lado podemos terminar debajo de sus ruedas, o si viene de frente puede llevarnos por delante

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