¿Ves alguna diferencia entre estas dos imágenes? No, no solo es el carril bici

Aunque muchos seguirán negándolo, las ciudades se están transformando. La vía pública no pertenece a los coches, y nunca debió hacerlo.

Les guste o no les guste a muchos, las grandes ciudades están cambiado, cada una a su ritmo eso sí, hacia una mejora con las personas que viven y las visitan en mente.

Visitar una ciudad en coche, no es lo más recomendable, como tampoco tener que utilizarlo a diario para ir a trabajar o cualquier otra tarea cotidiana.

Caminar, bicicleta (o patinete eléctrico), y transporte público, por ese orden, son las prioridades de muchos alcaldes, salvo excepciones como las de Madrid, donde la prioridad ha sido y sigue siendo el coche y la motocicleta.

No todas las calles de una ciudad permiten grandes cambios, pero con un poco de ingenio, y sobre todo valentía, se pueden mejorar muchas de ellas.

No es necesario crear carriles bici en todas las calles, pero si tomar medidas para que se pueda circular de forma segura en bicicleta

La polémica de carriles bici sí, y carriles bici no, sigue ahí, más por cabezonería de los autodenominados «calzadistas» (a.k.a. negacionistas de los carriles bici), que por sentido común o lógica pura y dura (demostrada con estudios de profesionales).

Dejando a un lado esto, como has visto en la imagen de portada y más abajo en este GIF animado, una calle donde existían dos carriles de circulación, plazas de aparcamiento a ambos lados, y una acera compartida, se puede transformar en algo más seguro y sobre todo más eficiente para todos los integrantes de la ecuación.

Unos simples setos separadores, pueden reducir considerablemente la contaminación que respiramos de los tubos de escapa de los vehículos motorizados

También seguramente te preguntarás «¿Y dónde aparcan ahora los conductores?».

Bien, te guste o no, eliminar plazas de aparcamiento es una de las principales medidas para desincentivar el uso del coche privado.

También has de saber, que tener un coche en propiedad, no te garantiza que puedas aparcarlo en la vía pública.

Esta es de todos, y como bien se comentaba en la lista inicial de orden de prioridades, primero pertenece a los peatones, luego a los ciclistas, y tercero al transporte público.

Si queda espacio libre o si es estrictamente necesario, el espacio sobrante queda para los coches.

Pensando así, y actuando así, es la única manera de mejorar las ciudades, en todos los sentidos, incluido el económico.

Hay quien seguirá negándolo hasta la saciedad, pero es normal, tienen el coche metido tan dentro de su cerebro, que les es imposible ni tan si quiera imaginar una vida sin él, o al menos sin utilizarlo a diario para todo.

¿Con cuál de las dos imagenes te quedas, con la primera o la segunda?

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