Pulsa «Intro» para saltar al contenido

Tracey Hannah gana su primera Copa del Mundo de Descenso en Snowshoe

Bartek Wolinski - Red Bull

Por fin. Lesiones, derrotas, caídas, idas y venidas, sonrisas y lágrimas, y un sin fin de obstáculos ha tenido que pasar la corredora australiana de Descenso en mountain bike hasta llegar a conseguir su primera general de la Copa del Mundo de DH.

Y es que al igual que su compatriota Troy Brosan, siempre ha sido la eterna segundona, o mejor dicho, tercerona.

Hasta cinco medallas de bronce en los Campeonatos del Mundo y numerosos podios en Copa del Mundo en su haber, dos competiciones totalmente diferentes, la primera se disputa en un solo día, y la segunda en diversas pruebas a lo largo de la temporada.

Pero esta era la suya, aunque no le iba a salir gratis, ya que la joven francesa Marine Cabirou le venia pisando los talones durante todo el campeonato, ganando incluso las tres últimas pruebas disputadas.

A Hannah le bastaba con estar entre las cinco primeras para llevarse la final, pero cualquier fallo o imprevisto podía dar al traste con sus esperanzas, o mejor dicho, ansiadas esperanzas.

Aunque no he escuchado a nadie decirlo, este año no solo ha sido el más difícil, si no el que más fácil lo ha tenido para conseguir el campeonato, ya que sus grandes rivales de los últimos años, Rachel Atherton, Tahnee Seagrave y Miriam Nicole han estado lesionadas desde principios de temporada, sin opciones de luchar por el título.

Y esto no le quita mérito a Tracey Hannah, pues ha estado líder desde la tercera prueba de ocho del campeonato, pero el estrés del que tanto hablan los corredores cuando se ven en las posiciones de cabeza, sobre todo cuando vas primero de la general, es mayor que el que no consigue llegar nunca hasta esa posición.

Y es que debe de ser mucho más estresante saber que este puede ser tu año y no puedes fallar en ninguna de las pruebas, que cuando tus opciones de victoria son más reducidas.

Pero, Hannah hizo valer su valentía y no falló. Su bajada, aunque no arriesgada, le permitía colocarse en quinta posición en Snowshoe, y así conseguir los puntos necesarios para superar a Cabirou, que veía escapar la Copa del Mundo de DH 2019 por tan solo 30 puntos pese a ganar la prueba de hoy.

Ahora solo le queda conseguir el maillot arcoíris en 2020, que seguro Hannah ya lo tiene entre ceja y ceja.