Hace unas semanas recibimos la noticia de la presumible llegada de un nuevo estándar de pedalier que se sumará a la ya de por si inmensa cantidad de estándares de pedaliers que inunda el mercado actual. Donde prácticamente y como viene ocurriendo en los últimos años, en cada feria o evento ciclista se presentaba alguno. Así que, a estas alturas ya no me voy a asustar, es más, ya ni me tomo esta noticia con una mínima sorpresa o expectación como pasaba hasta hace bien poco. La aparición de este nuevo estándar que supuestamente viene a simplificarnos la vida, es algo comprensible y hasta era de esperar, después de ver como las distintas marcas iban incorporando al mercado sus creaciones en una guerra de estándares sin sentido y como estos se iban traduciendo en más desaciertos mecánicos que aciertos. Y es que, quién más o quién menos hemos sufrido alguna vez en carnes propias con algunos de los sistemas Press Fit actuales alguna holgura, un mal ajuste o crujidos imposibles de hacer desaparecer.
Parece ser que estas nuevas soluciones tecnológicas que nos han tratado de meter a piñón alabando sus “bondades y ventajas” y que en cuestión de poco tiempo hemos visto desvanecidas no eran tan buenas como nos prometían. Al menos la nueva solución presentada tiene algo de lógica y sentido común, ya que está basada en un estándar más que conocido por su fiabilidad y buen funcionamiento como son los pedaliers de rosca. La coalición formada por Chris King – Argonaut Cycles ha sido la que ha abierto la veda, poniéndose manos a la obra para desarrollar este nuevo sistema, sumándose a esta iniciativa otras pequeñas empresas como Paragon Machine Works, White Industries y Engin Cycles para dar un giro en el desarrollo de este nuevo mix entre pedalier embutido y el citado pedalier de rosca “de toda la vida”, dando como resultado un nuevo estándar denominado T47 (Threaded 47) y que promete solucionar de una vez por todos los problemas que hasta ahora tenían los sistemas Press Fit.
Seguro que si me pongo a hacer un recuento de todos los nuevos estándares existentes de pedaliers embutidos alguno se me queda en el tintero, vamos a ver: BB30 / BB30 PF (Cannondale), BBRight (Cérvelo), OSBB (Specialized), BB86 PressFit , BB90 (Trek), BB92, BB386EVO… en fin, una locura.
Un poco de historia
Como decía, a lo largo de los últimos años nos hemos visto inundados con montón de propuestas sobre distintos sistemas de pedaliers embutidos (Press Fit). Los primeros en ver los beneficios de una caja de pedalier mayor fueron los ingenieros de Cannondale, que allá por el año 2000 presentaron su BB30, pensado para albergar un eje de pedalier de 30mm sobre una caja de pedalier de mayor dimensión en el propio cuadro, donde los rodamientos van alojados, consiguiendo ganar rigidez y aligerar el peso del conjunto frente a la propuesta tradicional del pedalier de rosca. En teoría la idea era buena, al menos sobre planos, dando el pistoletazo de salida a otras marcas que decidieron avanzar en este sentido, el resto de la historia ya la conocéis. Si bien, estos sistemas parecían que eran los ideales para dar sustitución a los inmortales pedaliers tipo BSA, pero nada más lejos de la realidad. Hoy en día y viendo el mal resultado general que han dado los sistemas Press Fit, muchas marcas han vuelto a incorporar en sus bicicletas los sistemas de pedalier roscados, por su gran fiabilidad y sus casi inexistentes problemas de ruidos, crujidos y desajustes indeseados.
Al poco tiempo de que Cannondale presentara su nuevo estándar, que por cierto no registró la patente en un claro movimiento (en vano) por tratar de que el mercado adoptara sus sistema, otras marcas se daban prisa en diseñar su propio sistema de pedalier chachipiruli, unos con más fortuna que otros, pero siempre hurgando en los mismos lugares; o bien agrandando la caja de pedalier o bien agrandando el diámetro del eje o ambos.
Por su parte, el gigante asiático Shimano, que no quería quedarse fuera de juego en esta batalla por “imponer” un nuevo estándar de pedalier, sacó su alternativa allá por el 2003, el Hollowtech II. Este nuevo estándar básicamente era una vuelta de tuerca de lo existente hasta la fecha, manteniendo la caja de pedalier tradicional pero agregaba unos milímetros más de anchura gracias a la incorporación de unos rodamientos externos (más o menos el concepto seguido por el T47). Solución que sigue siendo perfectamente válida hasta hoy en día, con un mantenimiento fácil y buen comportamiento mecánico, al césar lo que es del césar.
En que consiste el nuevo estandart T47 (Threaded 47)
Básicamente este nuevo sistema es un mix entre sistema de rosca y un sistema embutido (Press Fit). Este nuevo estándar está diseñado para ser empleado en cajas de pedalier de las utilizadas en los sistemas Press Fit 30, pero con la diferencia que se añaden unas roscas donde irán instalados los rodamientos, es decir, como en los sistemas BSA de rosca. Además hay que tener en cuenta el beneficio de poder utilizar los actuales estándares de bielas, tanto bielas con ejes de 30mm, como las de 24mm, previa instalación de unas cazoletas reductoras dependiendo de las medidas. Así mismo, si contamos con un cuadro de aluminio, un otro metal, con caja de pedalier PF30 o BB386 podemos llevarlo a un taller de mecanizado para que nos rosque la caja de pedalier con una métrica 47/1 con el fin de poder instalar el nuevo T47. Aunque esta solución a mí personalmente no me parece la más correcta.
¿Veremos la luz al final del tunel?
Cuando el sentido común se impone y se hacen las cosas con un mínimo de criterio, hay una gran probabilidad de que los beneficios de diseñar un nuevo estándar alcancen a la mayor cantidad de usuarios posibles. Esto es lo que han debido de pensar en Chris King, ya que los derechos de patente de este nuevo estándar tampoco han sido registrados, será un sistema abierto al uso, al igual que hizo en su día Cannondale, esperemos que con mejor suerte. Obviamente esta medida tiene la clara intención de que este sistema sea adoptado por el mayor número de fabricantes de bicis posibles, con el gran beneficio que esto puede suponer para los usuarios al dejar abierta la licencia de uso si al final este sistema una vez probado y requeté probado resulta que es tan eficaz como lo pintan. Por cierto, en este sentido no acepto los test que hacen las marcas en competición, pues como todos sabéis (y si no, os lo digo yo) en competición los componentes en las bicicletas se cambian más a menudo que en una bicicleta de un usuario no profesional, por lo que no es tan fácil sacar las faltas a productos testados en pruebas competitivas y otros test no tan reales. Me temo que parte de la culpa de los problemas que han venido presentando los sistemas actuales Press Fit ha sido por esto, por la suma de querer sacar a toda costa un nuevo sistema con el que competir por llevarse el gato al agua, junto con la de una mala planificación en los test de campo. Y es que las prisas nunca son buenas.
Bueno, a lo que vamos. Lo bueno de los fabricantes pequeños o no muy dimensionados, sin planes estratégicos a cinco años, reuniones leoninas sobre cuentas de resultados, cuotas de mercado, etc. , es que te permite tener más libertad tanto en toma de decisiones como en flexibilidad creativa. Por eso no nos debe de extrañar que haya sido una colaboración entre distintos fabricantes de tamaño pequeño/mediano los que se hayan reunido para tratar de solucionar de una vez por todas y de manera definitiva y eficaz los grandes problemas que presentaban los sistemas actuales Press Fit.
A priori los beneficios (sobre papel) de este nuevo sistema de pedalier parecen más que obvios. El T47 se muestra como la “solución definitiva”, promete un enorme rango de flexibilidad para que sea incorporado en los distintos diseños de cuadros de las diferentes marcas, es compatible con la mayoría de bielas existentes en el mercado, presenta facilidad de mantenimiento (como su antepasado BSA) y sobre todo, la promesa de eliminar los dichosos crujidos y holguras. Pero hay que ser conscientes que no es nada fácil conseguir que la industria adopte de buenas a primeras un nuevo sistema e invierta en modificar sus líneas de producción, y más por un “problema” como el de los crujidos y holguras que ninguna marca ha admitido abiertamente tener.
Siendo realistas, a corto plazo, es más que improbable que este nuevo sistema se imponga en los catálogos de los próximos años. El reacondicionar todos los procesos productivos, cambios en ingeniería, de diseño, logística, etc, tiene un sobrecoste que a día de hoy y para una fabricación a gran escala hace que no sea rentable para los fabricantes de bicicletas. Por lo que creo que este sistema se irá incorporando poco a poco a medida que vayan saliendo nuevos modelos, pero de ningún modo habrá un gran cambio en los sistemas de pedaliers actuales a corto plazo, esto es en los próximos 2-3 años (ojalá me equivoque). Imaginaros el gran trabajo para cambiar la producción de golpe de un portafolio de productos con más de 20 ó 30 modelos en cartera y con sus respectivas tallas. Así que teniendo en cuenta que el promedio de vida de un cuadro, en referencia a su proceso productivo, es de unos 4 ó 5 años, es prácticamente imposible que veamos la introducción en masa en los próximos 3 años de este nuevo estándar T47, al menos hasta el 2020 no se verá en la mayoría de catálogos de las principales marcas. Aunque siempre nos quedará el consuelo de encargar una bicicleta a medida y pedir que nos lo monten.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta la actual “fiebre del gramo” donde está arraigada la idea de “que a más euros, menos gramos” y que con la introducción de este nuevo estándar de sistema roscado haría incrementar el conjunto del pedalier en más de 100 gramos. Aunque particularmente a mi, este sobrepeso me parece más que asumible (y ridículo) frente a las mejoras que propone, debemos ser conscientes que hay un gran número de usuarios de bicis de gama alta, sobre todo de bicis de carretera, demasiados obsesionados con el peso (tú conoces alguno, fijo), y no creo que les haga mucha gracia el invertir en una máquina nueva una gran cantidad de billetes y comprobar que es más pesada que los modelos de años anteriores, y es que hay gente para todo.
Sea como fuere, esta solución parece ser la más óptima (al menos sobre papel) para solventar de una vez los problemas que presentan los sistemas pedaliers Press Fit actuales, y es que, si las roscas funcionan bien para que cambiarlas, ¿o no? Aunque si me pongo tiquismiquis y pensando en un usuario normal, de los de salir a disfrutar con la pandilla y pasar una jornada dando pedales de la forma más agradecida posible, tampoco creo que este nuevo sistema sea la panacea, ya que actualmente muchos modelos de bicicleta siguen incorporando, como he reflejado anteriormente, sistemas roscados, como es el Hollowtech II con todos sus beneficios, así que, si eres de los que no percibes realmente la minúscula diferencia que puede otorgar un sistema u otro respecto de la rigidez en la caja de pedalier a la hora de ejercer fuerza en las bielas, o mejor dicho, si tu tampoco eres un tiquismiquis, lo mejor es no pierdas el sueño por las soluciones del futuro y disfruta de la bici sin tanto remilgos con las soluciones del presente.
Por el momento, me quedo esperando a la próxima edición de la NAHBS el próximo febrero, donde los artesanos constructores de bicicletas más prestigiosos de EEUU presentarán sus nuevas creaciones y donde más de uno incorporará este nuevo estándar a buen seguro.