Las caídas de los ciclistas continúan tristemente en el Tour de Francia 2023, y de nuevo, una motocicleta ha estado implicada en el accidente.
Durante la décimo quinta etapa disputada ayer domingo entre Les Gets y Mont-Blanc, Krists Neilands del equipo Israel-Premier Tech sufrió una aparatosa caída intentando coger un bidón de una moto de carrera.
Neilands iba en el grupo de escapados que comandaba la carrera, y el incidente ocurrió a 37 kilómetros de la meta.
Hemos leído tanto en la prensa como en las redes sociales, que la culpa es del motorista, con títulos tan descarados como «Otra moto provoca otra caída en el Tour de Francia» y similares.
Puede que la moto tocase al ciclista, puede que el motorista debía también esperado a una zona recta, pero la culpa no es de «la moto»
La caída, que fue captada por las cámaras de televisión, pero no se aprecia que le ocurren a las ruedas de la bicicleta de Neilands, sobre todo a la delantera.
El motorista ofrece el bidón, como tantas veces se hace a diario en cualquier competición ciclista.
Neilands va a cogerlo, se suelta de la mano derecha del manillar, y algo desestabiliza su bicicleta, llevándose un tremendo golpe contra el asfalto, y terminando «por suerte», con su espalda contra un muro.
No se trata de buscar culpables, las caídas suceden, pero no era el sitio más adecuado ni para dar un bidón con una motocicleta ni para ir a cogerlo. Krists Neilands pudo terminar la etapa a mas de 13 minutos de Wout Poels, vencedor de la misma.
ZAZ, caída mientras se hidrataba #TDF2023 pic.twitter.com/8AQbXuwTEu
— Laura 🇲🇽 (@lauravettelista) July 16, 2023
