“Para empezar un gran proyecto, hace falta valentía. Para terminar un gran proyecto, hace falta perseverancia”.
(Anónimo)
Ya lo sé, desde vuestra perspectiva quizás pueda parecer “fácil” como me van saliendo las cosas. Y es que visto desde afuera casi siempre las cosas de los demás nos dan esa impresión. Tendemos a relativizar las cosas, tanto que en muchas ocasiones confundimos los esfuerzos realizados por los demás con la suerte, pero nada más lejos de la realidad.
Os habéis preguntado alguna vez como se llega a obtener esa “facilidad” (que no suerte) por la que se supone que van saliendo las cosas más o menos bien. En realidad todos tenemos la oportunidad de “facilitarnos” o complicarnos la vida tanto como deseemos, no lo olvidemos.
Cada persona es dueña de sus actos y por ende de su vida presente y futura. Todo lo que hagamos hoy tendrá consecuencias en nuestro futuro.
Pero mi caso tenéis algo de razón, me es relativamente más fácil avanzar hacia mi meta porque tengo un pequeño secreto. Mejor dicho, tengo una serie de “herramientas” que me ayudan a “facilitarme” el camino en mi día a día y que sin ellas estaría un poco vendido en esta nueva aventura.
Al igual que en el taller cuento con una serie de herramientas dispuestas a facilitarme el trabajo con las bicis y entre las que hay unas cuantas que tienen un uso repetitivo y sin las cuales estaría totalmente perdido, pues aunque podría sustituirlas por otras herramientas para salir del paso, no sería lo mismo.
Sin duda alguna la llave del 15 por su versatilidad, es mi preferida. Con ella aprieto y desaprieto hasta conseguir el ajuste perfecto y por eso, tanto esta llave como otras, hay que tenerlas a mano para que nos faciliten las cosas en nuestro día a día.
En mi día a día como aventurero-emprendedor también cuento con otra serie de “herramientas personales” o “llaves” que utilizo para facilitarme el alcanzar mi objetivo.
Son simples, fáciles de utilizar y sobre todo son cómodas de llevar. Son herramientas que cualquiera las tiene al alcance aunque a veces prefiramos no hacer uso de ellas. Yo por si acaso, os enumero las mías por si os sirven de algo.
- Llave del 15. Decisión. Para mi y creo que para cualquiera que desee lanzarse a la aventura de emprender es la más importante. Si no contamos con esta llave, mejor no emprender, pues esta llave debe ser vuestra herramienta principal, vuestra llave del 15.Es la que nos apretará para salir del letargo y abandonar la comodidad que tiene el “no hacer nada”, la que de verdad nos hará ponernos en marcha y dar vida a nuestro sueño para empezar a convertirlo en realidad. Las personas indecisas son las que al final no van a ninguna parte, no avanzan, es como si tuvieran una losa de cemento pegada a los pies. Si tienes una idea que pueda mejorar tu calidad de vida, ¡Adelante! Da igual lo largo que sea el camino, lo importante es ponerse en marcha, dar el primer paso.
- Llave del 2. Motivación personal. Las ganas reales de cambiar las cosas es lo que os situará en la línea de salida de vuestra particular carrera, en vuestro “km 0” hacia vuestro éxito. Es importante creer en uno mismo, aunque nos vengan dudas si estaremos o no a la altura de las circunstancias y si estamos preparados para enfrentarnos con éxito a una nueva carrera de fondo. Todas las personas pueden cambiar su rumbo si realmente se lo proponen. Con que en nuestra actual vida aparezca una sola razón para cambiarla ya es suficiente, aunque en la balanza sea mayor el número de malas razones para no arriesgarnos. Una buena razón ya es estímulo suficiente para ponernos en marcha.
- Llave del 3. Alejarse de las personas tóxicas, o al menos no prestarlas atención. Esta llave también es una de las más importantes para mi, ya que puede suponer un gran freno en nuestro intento de cambio y mejora. Cuantas veces hemos oído eso de: “Y a dónde vas con tu edad”, “ Y quién te manda meterte en esos charcos” y cosas por el estilo. Las personas tóxicas tienen la particularidad de ir en casi todas las ocasiones con el disfraz del pesimismo, simplemente porque en sus propias vidas no han experimentado la necesidad de “ir más allá”, no se han atrevido a “dar el paso” o simplemente son más conservadoras. No digo que dejemos de lado a estas personas literalmente, pues muchas veces son personas que nos quieren y se preocupan por nosotros, quizás en exceso. Pero no hay que prestarlas atención en esta cuestión, pues mermarán nuestras ganas de emprender y aventurarnos.
- Llave del 4. Apoyo, ánimo, banderas y aplausos de la gente importante en tu vida. Ya que sin el apoyo de estas personas -no hablo de lo económico- pocos pasos sinceramente podremos dar en nuestro camino. Como humanos que somos necesitamos la reprobación de nuestros seres queridos, para refutarnos en que estamos haciendo las cosas bien. Al igual que también necesitamos sus consejos y ánimos cuando no tenemos claro por dónde seguir, como también nos hacen falta sus críticas sinceras cuando perciban que nos procedemos bien.
- Llave del 5. El tiempo no debe ser un obstáculo para empezar un nuevo viaje hacia una mejora personal o profesional. el tiempo no es un factor que deba echarnos para atrás. Da igual cuanto tiempo tardemos en realizar nuestra primera maratón o nuestra primera ascensión a una montaña, lo importante es llegar. Al igual que en nuestro camino particular, NO debemos renunciar a realizar nuestros sueños solo por el tiempo que nos llevará cumplirlos, ya que el tiempo pasará de igual modo lo empleemos o no en tratar de alcanzarlos. Lo importante es tomar la decisión de empezar, cuanto antes empecemos antes llegaremos a la meta. El tiempo como dijo Einstein es relativo y en cualquier caso no debe ser un impedimento para tratar de materializar nuestros planes, Entre otras cosas por eso es que el planning deber ser flexible. Pero lo que sin duda es necesario es disponer de tiempo para hacer las cosas bien.
- Llave del 6. Orgullo. El orgullo es ese compañero de viaje que nos acompañan en todos los proyectos que emprendemos, grandes o pequeños, desde una marcha ciclista a una partida de parchís. A veces es enemigo y a veces amigo. Enemigo cuando nos ciega tanto que somos incapaces de ver nuestros propios errores, ni ver más allá de un metro. Y amigo cuando en la dosis justa nos inyecta un subidón de entusiasmo que nos sirve para intentar conseguir los retos que nos hemos marcados. El orgullo en su dosis exacta es un gran aliciente y aliado que sin ninguna duda nos puede ser de gran ayuda. A quién no le gusta hacer las cosas bien, en primer lugar para sentirnos realizados y en segundo para que se sientan orgullosos de nosotros nuestros seres queridos.
Cuando cuentas con estas pequeñas herramientas y las sabes manejar (gestionar) en tu provecho personal, estas generan automáticamente una sensación de euforia y alegría, dando como resultado otra llave importante para nosotros, la confianza en uno mismo.
Y esta confianza en uno mismo es la que nos llevará a un proceso de crecimiento personal en el que debemos trabajar y que poco a poco nos irá fortaleciendo cada vez más y más, hasta que llega un punto en que obtenemos esa “facilidad” para ver más claro el camino y seguir el rumbo marcado en nuestro planning.
Tenemos que creer en nosotros mismos para poder transformar nuestros miedos en ilusión, valentía y coraje. Solo así seremos capaces de afrontar con éxito cualquier reto, por muy complejo que sea.
Basta con empezar a utilizar estas herramientas en nuestro día a día y comprobar sus efectos casi de inmediato. Buscad vuestra llave del 15, que el resto irá apareciendo.
Un abrazo,