La comunidad de Madrid con su actual alcaldesa Ana Botella, pretende cerrar al tráfico motorizado el centro de la ciudad, con algunas excepciones.
El anillo de 350 hectáreas en las que se encuentran las zonas de Embajadores, Sol, Palacio Real y Cortes, solo podrán ser transitadas por los vehículos a motor de residentes, usuarios de alguno de los 13 parking autorizados, repartidores (con horario restringido), motocicletas con horario diurno (de 7 de la mañana a 10 de la noche), bicicletas y alguna excepción más como podrían ser los vehiculos oficiales, ambulancias, servicios, etc…
Un gran hermano de 22 cámaras de seguridad que tendrá un coste anual de mantenimiento de 500.000 euros, cotejara todas las matrículas y sancionará a los vehículos que incumplan la norma con 90€ de multa.
En un futuro cercano se pretende ampliar el anillo libre de coches a los barrios de Chueca y Malasaña, así como aumentar el coste de los parquímetros, sobre todo a los coches que más contaminan.