Después del último capítulo de la serie #Lllámametonto, justo antes de la pandemia, en el que vimos como algunos organizador se dedicaban e vender a precio de oro salir en los puestos de cabeza de sus marchas cicloturistas, vamos con la cuarta entrega de «Llámame tonto» (sí, es el Llámame tonto 3, pero esto va como las fases…).
En los años 90, se popularizaron las cubiertas de colorines para bicicletas entre algunos profesionales del mountain bike y del ciclocrós.
Como no, la fiebre llegó a extenderse rápidamente entre todos los aficionados, y claro, aquellas cubiertas de colores, con compuestos supuestamente de alto secreto que te hacían correr más, realmente lo que ocurría es que se desgastaban con mirarlas, pinchabas hasta con las cáscaras de las pipas, y para colmo, costaban un ojo de la cara, cada una.
Algunos de los modelos más populares fueron las Michelin Wild Gripper verdes, o las Tioga Psycho K blancas, o amarillas más bien.
Ahora las puedes encontrar en Ebay al precio de 200€ la pareja, y no las toques mucho, o te quedarás con los tacos entre las uñas.
Las cubiertas «Tan Sidewall», las marroncitas, las buenas…
Pocas eran las marcas de cubiertas, tanto de montaña como de carretera o gravel, que tenían en su catálogo ruedas de «colorines» y mucho menos, con los laterales en color marrón o carne.
Este tipo de ruedas fue anterior al «boom» del mountain bike en los 90, y es por ello que algunos piensan que les dan a las bicicletas un toque «retro». Y la verdad que algunas bicis les quedan que ni pintadas. 😉
En su momento muchos agradecieron que las cubiertas fueran totalmente negras, pues estaban cansados de tener que limpiar los laterales cada dos por tres o que estos se rajasen con frecuencia.
Algún que otro fabricante, o más bien, alguna persona que ha trabajado para empresas de cubiertas de renombre, ya dijo que todo lo que fuese añadir un color distinto al negro a unas cubiertas, era debilitarlas, pues todo el compuesto para conseguir ese color se lo estabas quitando a la goma en sí, encargada de gran parte de la resistencia, elasticidad y durabilidad de las ruedas.
Además, las cubiertas de bicicletas actuales poseen un compuesto para que los rayos ultravioletas del sol y el paso del tiempo no las agriete prematuramente. Este compuesto denominado «Carbon Black», como su no nombre indica, es negro.
Y hoy me saltó una publicación de las nuevas cubiertas «Tan Sidewall» de Specialized. En castellano, cubiertas con laterales morenitos.
El eslogan original es el siguiente, a ver que tal suena:
«Nuestros neumáticos con flancos marrones son un éxito entre los corredores de nuestros equipos de competición, y sabemos que gustan a cualquier ciclista de montaña que ame el aspecto limpio y atemporal que estos neumáticos proporcionan a la bicicleta. ¿Son más ligeros o más flexibles que nuestros neumáticos negros? No, pero tener una apariencia profesional aumenta la confianza, y eso realmente nos hace rodar más rápido.»
Pues ahí lo tienes, si quieres aumentar tu confianza sobre la bicicleta, lo que tienes que hacer es quitar tus feas ruedas de color carbón, y poner unas con los laterales marroncitos, si son las Fast Track, Renegade o Ground Control Tan Sidewalls mejor aún.
Además, «vas a rodar más rápido«. Si te lo dice Specialized, es que es así, por eso las llevan sus corredores.
Posdata: Yo utilicé alguna cubierta de colorines en los 90, pero en la rueda delantera si no recuerdo mal. Los neumáticos con los laterales marrones me caen bien, y en el caso de que los utilizase, sería para fardar de ellos, o mejor dicho de bici. Pero como estoy cansado de ir tan lento, quizás las pruebe…