Las cosas van bien, pero no como le gustaría que fuesen a Tadej Pogacar tras dos semanas de Tour de Francia 2023.
Despejadas han quedado todas las dudas de si tras su fractura de muñeca y su mes de baja antes de partir hacía Bilbao le iban a pasar factura o no.
Es el más fuerte de la carrera, por poco, pero lo es, y el lo sabe.
Le está costando mucho recuperar el minuto perdido en la quinta etapa, la única donde se ha visto a un Jonas Vingegaard más fuerte.
Y es que Pogacar no parecía el mismo. El calor, la falta de ritmo de competición dando el 110%, o la ausencia de sus compañeros de equipo (ni si quiera Yates, que entró el último del grupo), le pasaron factura.
Jonas Vingegaard también tiene un plan, o debería tenerlo, pues la ventaja es mínima y puede pasar de todo hasta llegar a París
Tendremos que esperar a que termine la contrarreloj de mañana, una crono corta de 22 km pero dura, con un tendido puerto final de 6 kilómetros como colofón final, para saber como quedan las cosas.
Como es lógico, dependiendo del resultado, los equipos comenzarán a planear sus estrategias para los últimos cinco días de Tour que restarán.
Atacar a 3, 2, o 1 kilómetro de la meta cuando la etapa termina en subida, ya hemos visto que no funciona, salvo que la carrera como el recorrido sean muy duros, y entonces las piernas comiencen a fallar.
Las fuerzas están muy igualadas, y hay que cambiar la forma de atacar si se quiere doblegar al rival.
Wout van Aert es una pieza clave para ganar a Jonas Vingegaard. Deshacerse de él es prácticamente imposible
Tan solo quedan dos etapas de montaña, y aunque no terminan en alto, la bajada final no influirá en los resultados, salvo desgracia.
La etapa 17 de pasado mañana con final en Courchevel, a más de 2.000 metros de desnivel, está marcada en el calendario del esloveno y el danés en rojo.
Serán 160 kilómetros con tres puertos de primera, uno de segunda y el último, el Hors Catégorie de Courchevel juto a Col de la Loze.
Atacar desde el primer puerto para romper la carrera, ¿pero qué hacer con Kuss y van Aert?
¡He aquí el problema!
En un mano a mano entre Pogacar y Vingegaard, el más listo, hábil y como se ha comentado, fuerte, es el primero.
Pero Vingegaard cuenta entre sus aliados con grandes nombres, entre ellos el mencionado Wout van Aert, además de Sepp Kuss, Benoot o Kelderman.
Luchar contra todos ellos no es posible para Tadej Pogacar, al igual que no lo es, salvo que tenga el día bueno, o Vingegaard el malo, atacar a 2 kilómetros de la meta.
Si Tadej Pogacar quiere marcar las diferencias en este Tour de Francia 2023, ha de reinventarse y sorprender al Jumbo-Visma. Romper la carrera de alguna manera antes de llegar al último puerto, mermar a sus rivales. Hacer algo diferente a lo hecho hasta ahora…