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Impuesto de circulación a bicicletas, microchip, matrícula… El alcalde de Pamplona re-abre la veda al ciclista

De nuevo un político propone matricular las bicicletas, cobrarles un impuesto de circulación y hasta colocarles un microchip

Ya estaba tardando en llegar el «político de turno» para sacar provecho del aumento de personas que han optado por desplazarse en un medio ecológico, saludable y seguro como es la bicicleta durante estas últimas semanas.

El alcalde de Pamplona, en una reciente entrevista, ha comunicado que abrirá el debate para la implantación de un Impuesto de Circulación para Bicicletas, al que además acompañará la matriculación de las mismas y la colocación de un microchip para que puedan ser multadas con mayor comodidad.

Sí, no es una broma…

Después de que han pasado dos días desde que se ha dado a conocer la cuantía total de las ayudas del estado al sector de la automoción, la cual inicialmente era de 400 millones de euros, luego de 800 millones, y ahora, nada más y nada menos que 3.750 millones para sostener una industria durante los dos próximos años y que va de cabeza hacía el precipicio.

Sí, otros países han dado más ayudas al coche, casi 10.000 millones en el caso de Francia, pero ellos tienen marcas propias del motor y las ayudas van dirigidas a sus empresas nacionalizadas, sumado a que llevan años invirtiendo junto a Alemania en el coche eléctrico, y lo más importante, en la fabricación de las baterías de estos.

Pero de la automoción os podemos hablar en otro momento, ya que es para dar de comer a parte.

El señor Enrique Maya propone que las bicicletas, y por ende los ciclistas, sin descartar si los impuestos irán dirigidos a «una bicicleta» o a «un ciclista» (el cual puede tener varias bicicletas), paguen un impuesto de circulación.

Además, para alimentar a los calzadistas, que están en contra de todo lo que sea un carril bici y les importa bien poco que muchos no puedan ir por la carretera como ellos, entre las frases a enmarcar del año respecto a «Político+Bicicleta», Maya ha metido el término carril bici.

Quizás muchos no sepan que la gran mayoría de carriles bici realizados en España, siendo redundante, la mayoría mal diseñados, han sido realizado gracias a subvenciones de todo tipo, muchas provenientes de Europa.

Los calzadistas tampoco se dan cuenta de que quizás el impuesto vaya dirigido a los que utilicen con su bicicleta la calzada (la carretera), y no a los que vayan por carriles bici, aunque el dinero recaudado de ellos se utilice también para mantener las infraestructuras ciclistas como estas vías ciclistas.

Tampoco se dan cuenta de que los famosos carriles 30, inservibles en toda regla al estar compartidos, o mejor dicho, invadidos por los coches, a ojos de un político, también son «carriles bici».

En vez de dar ayudas, se quieren poner trabas

Tampoco parece darse cuenta el señor alcalde de Pamplona, de que la Humanidad está tratando de eliminar los coches a favor de las bicicletas y otros medios de transporte sostenibles, y no precisamente para pagar menos impuestos, sino para tener unas ciudades, y por ende, un planeta, donde se pueda vivir (ya no se puede decir vivir en condiciones por que eso es muy difícil).

Cobrar impuestos a la bicicleta, cuando lo que se tendrían que dar son más ayudas para fomentar su uso, infinitamente más, es sin duda una ocurrencia sin pies ni cabeza, salvo que haya otros intereses de los que no se menciona nada.

Cada vez hay más estudios que demuestran que utilizar la bicicleta como medio de transporte no genera gastos a la sociedad (es decir, no consume de las arcas de los estados), sino que genera beneficios con su uso.

Quizás muchos como al señor Maya, no lleguen a ver ese beneficio, pero para eso están los estudios, las estadísticas y las matemáticas.

Pero claro, como todo, unes calzadistas, sector de la automoción, el cual a través de sus máximos organismo nacionales ya ha declarado que si se impulsa el uso de la bicicleta como medio de transporte les perjudicará sus negocios, sumado a conductores y no conductores que tienen el «odio al ciclista» metido en lo más profundo de sus sesos o los medios de comunicación a sueldo de las marcas de coches y motos…

Las aseguradoras que ven bajar las nuevas pólizas al no venderse coches y se frotan las manos con las bicicletas eléctricas.

La propia DGT que en más de una ocasión ha tratado de colarla, y un largo etcétera que solo mira por sí mismos o su bolsillo.

O nos ponemos firmes con argumentos demostrados, o finalmente, de alguna manera u otra, nos la meterán doblada.