Este fin de semana el equipo Iberobike – Boamorte nos deplazábamos a Turienzo Castañero (León), donde el domino 24 de Marzo tenía lugar la segunda prueba puntuable del Open de Castilla y León XC.
Dado que de nuevo, la climatología no acompañaba, y la hora de inicio de la prueba eran las 11 de la mañana, decidimos madrugar un poco e ir el mismo día de carrera, con tiempo suficiente para dar una vuelta previa al circuito. Salimos de La Vecilla lloviendo…, pasamos por León ciudad lloviendo…, y llegamos a Turienzo a las 9:30…, y, ¡no llovía!. ¡Cuan grata sorpresa!. Pero lo cierto es que la alegría nos duró bien poco, a media vuelta de reconocimiento empezó a llover y no paró en lo que restó del día.
No obstante, que lloviera el día de carrera no fue novedad, ni mala suerte, sino una continuidad de la misma climatología que había imperado durante toda la semana, y tanta agua solo podía tener un resultado…, barro (por suerte sólo en el tramo de bajada).
El circuito de Turienzo, de unos 6,9 km, se caracteriza por ser un circuito bastante continuo que permite coger ritmo. Comienza con un tramo de subida relativamente larga y ancha en su mayor parte, lo que permite adelantar sin problemas salvo en un pequeño sector inicial de sendero estrecho. Una vez arriba, un corto tramo de llaneo conecta con el sector de bajada por veredas estrechas y que este fin de semana, gracias al barro, daban al circuito un punto extra de dificultad y espectáculo para el público aistente…, por desgracia para los corredores las caídas fueron abundantes en este tramo, ya que el terreno estaba muy deslizante y la rueda delantera se iba con mucha facilidad.
En mi caso, es un circuito al que me adapto bien, las subidas continuas me gustan, cojo mi ritmo y suelo tener buenas sensaciones, así que a diferencia de otros, en éste disfruto y me lo paso bien. De nuevo tuve dos aterrizajes forzosos y no deseados (últimamente no libro nunca ;-)) sin consecuencias, que es lo importante.
Solo corríamos dos chicas, Ana Casado (A.D.C. Fco. Pizarro) y yo, Sara García (Iberobike – Boamorte), así que el pódium estaba asegurado y no había ningún tipo de presión, lo que me permitió salir tranquila y disfrutar de la carrera. Finalmente conseguí entrar en primera posición.
En élite, Alejandro Carrión (Molero Bikes) puso de manifiesto su calidad como rider dominando la carrera con margen en solitario desde salida hasta paso por meta. En segunda posición llegaba Ramón Araujo (Golpe de Pedal), seguido por Adrián Huerga (Transportes Chema – Bolaños) (primer clasificado en Sub23).
:: CLASIFICACIONES
Élite y Sub23
1. Alejandro Carrión (Molero Bikes)
2. Ramón Araujo (Golpe de Pedal)
3. Adrián Huerga (Transportes Chema – Bolaños)
4. Jorge Cantalicio (Btt Arroyomolinos)
5. Manuel A. Parada (Racing Cycling Team)
Líder del Open: Alejandro Carrión (Molero Bikes)
Élite Femenina
1. Sara García (Iberobike – Boamorte)
2. Ana Casado (ADC. Fco. Pizarro)
Líder del Open: Sara García (Iberobike – Boamorte)
Cadete
1. Pablo Pérez (Molero Bikes)
2. Sixto Vaquero (Transportes Chema – Bolaños)
3. Mario Puente (PDM Bembibre Ciclista)
4. Carlos Álvarez (PDM Bembibre Ciclista)
5. Sergio López (Solociclismo CDE)
Líder del Open: Sixto Vaquero (Transportes Chema – Bolaños)
Junior
1. Eduardo Yusto (Transportes Chema – Bolaños)
2. Javier Jiménez (Molero Bikes)
3. Alberto Cámara (Btt Arroyo molinos)
4. Alberto Olmos (Btt Arroyomolinos).
Líder del Open: Javier Jiménez (Molero Bikes)
Master30 y Senior
1. Gregorio Porres (Zona Sport)
2. Mario García (Enbici Grupo Salvaje)
3. Alejandro Trasbasch (Racing Cycling Team)
4. David Rueda (Mtb Guardo)
5. Andrés García (Transportes Chema – Bolaños)
Líder del Open: Gregorio Porres (Zona Sport)
Master40 y Master50
1. Jesús Sánchez (Enbici Grupo Salvaje)
2. Roberto Álvarez (CDC León)
3. Juan Luis Llamas (CDC Paraíso Cantinas)
4. Javier Puente (Red Ciclista – Fuji)
5. Sergio López (Entrehoces Conquense Club)
Líder del Open: Jesús Sánchez (Enbici Grupo Salvaje)
Por último agradecer al club organizador Bembibre Btt su hospitalidad y cordialidad. Personalmente, al ser la corredora local, me hicieron sentir como en casa. La organización de la prueba fue perfecta, sin ninguna pega: circuito bien marcado, salida puntual y en cajones bien organizados y colocados uno a uno por los árbitros, avituallamientos en carrera, duchas con agua caliente (por lo menos yo tuve esa suerte), entrega de premios en un pabellón a cubierto de la lluvia y para comer un plato de paella por 2,5 €…, espero que poco a poco esta prueba vaya cogiendo nombre y en el futuro el buen hacer se vea recompensado con una mayor afluencia de inscritos.
Fotos: Carlos Rodriguez
