Los ciclistas de carretera y urbanos que utilizan bicicletas eléctricas no eran contabilizados hasta ahora cuando sufrían un atropello, por eso las estadísticas que se manejaban hasta el momento no eran del todo reales.
Se estima que el porcentaje de atropellos se incremente en un 10% cuando a partir del día 1 de Enero la Policía de Nueva York comience a contabilizar los siniestros de las Ebikes en sus carreteras.
Si ya de por si la cifra de atropellos y muertes solo en la ciudad de New York era ya alarmante, con más de 20 victimas mortales hasta el momento, ahora lo será aun más.
Por suerte en nuestro país no tenemos ese problema, ya que todas las bicicletas eléctricas que no sobrepasen los 25 km/h y los 250W de potencia (entre otras características) son siempre consideradas bicicletas.
Aunque como hemos publicado en otras ocasiones, se están tomando medidas drásticas para disminuir los siniestros entre ciclistas y conductores de vehículos a motor, los datos siguen reflejando otra realidad muy distinta.
Parece ser que la sangría de atropellos es un problema «global» de las grandes ciudades, entre las que se encuentra Nueva York, pero sobre todo las que no tienen una cultura de la bicicleta arraigada desde hace años.
