España sigue retrocediendo a pasos agigantaos al pasado, dando cada vez más importancia y más derechos a los vehículos motorizados como puedan ser los coches o las motocicletas, y restringiendo el uso de bicicletas o patinetes eléctricos.
Salvo excepciones muy puntuales, las ciudades siguen dominadas por los motorizados, y ahora parece que también el monte.
En Gran Canaria, por ejemplo el famoso Cabildo se ha sacado de la manga una prohibición de practicar mountain bike por la mayoría de senderos de la isla, colocando carteles que prohiben el paso de bicicletas.
En Madrid, los Agentes Forestales colocan radares para ciclistas de montaña o se esconden en las sendas para «darles caza.
Pero no solo en el monte, también en la carretera. En vez de quitar coches que generan atascos, quitan ciclistas porque «molestan». Literal:
Como incongruencia, luego ves en redes sociales anuncios publicitarios como el de las Islas Canarias, que pagamos todos, en los que se dice que es un paraíso para la práctica del ciclismo de montaña. Todo normal, todo bien.
Prohibir a los ciclistas, pero permitir el paso de vehículos motorizados. Así estamos en España…
Desde Barcelona, y como puedes ver en la imagen de portada, algún otro iluminado ha decidido que un camino o pista forestal, debe de ser de uso exclusivo para vehículos motorizados, prohibiendo el paso de ciclistas de cualquier tipo.
A las prohibiciones de ir en bicicleta por la mayoría de senderos del Parque Natural de Collserola, mientras se permite circular en coche y aparcar en cualquier lado, ahora llega la prohibición también a circular por algunas pistas o caminos, con un claro mensaje:
«Paso exclusivo de vehículos motorizados»
El cartel da un itinerario alternativo a los ciclistas, pero como decimos, España sigue retrocediendo a pasos agigantados al pasado, dando más privilegios a los motorizados que a los vehículos como las bicicletas, que ni contaminan, ni hacen ruido, ni erosionan (en comparación con cualquier otro vehículo).