Giant Group, el mayor fabricante de bicicletas del mundo, parece que no le terminan de salir las cuentas en este final de año 2022.
Pese a que afirman que cuentan con una economía sana, con liquidez y créditos bancarios, en los últimos días se ha filtrado la noticia de que Giant Group ha enviado un comunicado a sus proveedores, pidiendo el aplazamiento del pago de las última facturas y productos servidos.
En el escrito, se pide ampliar el plazo de pago 45 días más, con motivo de la caída de la demanda de bicicletas y el alto stock con el que se encuentran.
Aunque los datos de ventas son positivos, parece que las previsiones no han ido como se esperaban en esta segunda mitad de 2022.
En el primer trimestre de este ejercicio, las ventas de bicicletas aumentaron un 14%
Las ventas que más han bajado son las de bicicletas de gama baja y gama media.
El famoso boom de la bicicleta de hace dos años poco a poco va perdiendo fuera, y tras la vuelta a la normalidad, el uso de la bicicleta se ha estancado en muchos lugares del mundo.
A su vez, el aumento de costes de las materias primas, de los envíos, y en general, de toda la cadena, sumado a la falta de algunos productos y otros con mucho retraso, han mermado toda la cadena de producción.
El retraso de pago que ha pedido Giant a sus principales proveedores, sería para afrontar los peores meses del año para la industria de la bicicleta, los meses de invierno.
Así pues, desde diciembre de 2022 a marzo de 2023, los pagos de Giant Gruop estarían congelados o aplazados, como lo quieran denominar.