Tras la finalización de la O Gran Camiño 2023, con todos sus altibajos que se han vivido, la organización ha compartido en las últimas horas algunas imágenes grabadas con el dron oficial de carrera.
Unas espectaculares imágenes que te hemos mostrado en el vídeo de este artículo con Jonas Vingegaard en la contrarreloj final como protagonista.
Como nunca llueve a gusto de todos, algunos las han calificado como de imágenes muy bonitas, y otros, como si fuesen una auténtica basura.
Pero las críticas de algunas personas de renombre del sector, no van por la calidad de las mismas, si no por la seguridad de los ciclistas, y en este caso de Jonas Vingegaard.
Si has visto el vídeo, se puede ver como el dron se acerca varias veces al ciclista del Jumbo-Visma cuando va acoplado a su bicicleta Cervélo.
El dron e O Gran Camiño fue controlado por un piloto de drones profesional
La peligrosidad no viene dada únicamente por que la aeronave no tripulada pueda chocar contra el ciclista, hay más cosas que se han comentado al respecto.
Una de ellas es que a diferencia de otras tomas aéreas que hemos visto en competiciones profesionales de ciclismo en carretera, ciclocrós o mountain bike, donde el dron iba a cierta distancia y casi siempre por detrás de los ciclistas, en O Gran Camiño, la aeronave no solo se acercaba bastante Vingegaard, sino que lo rodeaba y pasaba incluso por delante.
Esto, en cierta manera, podría molestar a los ciclistas y hasta distraerlos en determinados momentos.
¿Crees que el dron de O Gran Camiño volaba demasiado cerca de Jonas Vingegaard en la crono?
La normativa UCI sobre el uso de drones en competiciones ciclistas se actualizó el pasado mes de marzo, tras hacer aterrizar un drone que grababa en el ciclocrós de Superprestigio de Gavere:
Este supuestamente lo hacía sin el permiso pertinente o autorización de los jueces, algo que no ocurrió en O Gran Camiño.
La normativa UCI sobre el uso de drones para grabar vídeo o tomar fotografías en competiciones ciclistas establece lo siguiente:
«El organizador podrá autorizar la toma de fotografías y/o videos por medio de aeronaves, incluidos drones u otras aeronaves pequeñas, sujeto a la obtención de autorización para operar el equipo correspondiente de manera segura desde el lugar previsto.
El organizador también se asegurará de que cualquier aeronave utilizada no afecte la conducta deportiva del evento y deberá realizar o exigir que se realice una evaluación de riesgos detallada con respecto a los corredores, oficiales y espectadores que asistan al evento.
El organizador debe asegurarse de que el uso de dicho equipo en el lugar del evento esté explícitamente previsto y comunicado y cubierto en su totalidad por la compañía de seguros correspondiente.
Finalmente, los organizadores tomarán las medidas apropiadas para garantizar que las aeronaves, incluidos los drones y otras aeronaves pequeñas, no sean utilizadas por terceros sin estar debidamente autorizados y no obstaculicen las operaciones deportivas o la explotación de los derechos de terceros (por ejemplo, imagen o medios derechos).»