Desde hace algunos meses, la bicicleta está en boca de todos, desde los que relegaban de ella por tener coche propio con el que creían moverse más deprisa, hasta los que preferían las horas muertas en el transporte público, incluso las marcas del motor que están viendo como las dos ruedas les ganan cada vez mas terreno.
Lo cierto es que bienvenida sea la bicicleta, para todos, y es ahí donde reside el principal problema actual. No hay bicicletas nuevas para todos.
Muchos seguirán opinando que en la tienda de su barrio ven bicicletas a la venta en los escaparates, pero la realidad es bien distinta.
Muchos países aún se encuentran confinados y con los comercios cerrados
Si miramos de puertas hacía afuera, aún existen muchos países, sobre todo europeos, donde sus ciudadanos solo pueden salir a la calle para ir al trabajo, los que lo mantienen claro, o a comprar comida y medicinas. Algunos llevan así desde el verano pasado y otros han comenzado ahora a cerrar a cal y canto, incluidas fronteras, como es el caso de Estonia, uno de los países europeos con menos casos registrados, hasta hace algunas semanas…
Los problema de abastecimiento no solo proceden de la gran demanda de bicicletas, también de los problemas en las fábricas asiáticas, el incremento de las materias primas como el aluminio o el acero, y como no, el coste de los envíos en conteiner marítimos, multiplicado casi por 10 en los últimos meses.
Halfords, en Reino Unido y su estudio de mercado «The Great Bike Boom Continues»
Volviendo al Reino Unido, donde muchos aseguran que no sale el sol más que en contados días, y la niebla y la lluvia les acompañan a diario, es uno de los países donde el crecimiento del uso de la bicicleta y la demanda de estas, se ha dejado notar con más claridad.
Su gobierno instó a sus ciudadanos a no tomar el transporte público y evitar coger el coche para no contaminar más de la cuenta ni provocar atascos interminables. (En España aún seguimos esperando que alguien haga o diga algo similar).
Allí, un estudio realizado por Halfords mediante una encuesta a 2.000 personas, ha revelado que el boom de la bicicleta continuará mucho más allá cuando la situación actual se regule y volvamos a ser personas «libres».
El 37% de los encuestados quiere comprarse una bicicleta nueva en los próximos seis meses, con un 33% de ellos que afirma que utilizará de aquí en adelante la bicicleta, incluso si todo vuelve a la normalidad.
Las bicicletas eléctricas abre aún más el abanico de nuevos ciclistas urbanos
Para los más perezosos, los que creen que no pueden o los que tienen algún tipo de problema físico, las bicicletas eléctricas han supuesto la solución a todos sus problemas a la hora de cambiar su medio de transporte habitual por el de los pedales.
Del 36% de la población que optó durante el pasado año en comprarse una bicicleta como medio de transporte, el 24% optó por una ebike.
Las razones por las que se decantaron por una bicicleta con motor fueron las siguientes:
- 67% :Es más sencillo y rápido para distancias mas largas
- 46%: Quieren llegar meno cansado al trabajo
- 37%: Tienen problemas físicos que les impiden usar una sin motor
El cambio del coche privado por la bicicleta ha supuesto que exista más espacio para peatones y ciclistas en las ciudades, menos ruido, menos contaminación, y menos peligro, por lo que muchos agradecen el cambio.