Cuando a un ciclista no le queda más remedio que golpear los coches

No se trata de golpear los coches por afición, ni por violencia cuando vamos en bicicleta. Pero hay situaciones en las que no queda más remedio.

Hace tiempo escribí un artículo cuyo título era «Ayer aparté a un coche (conductor) de una patada«, y algunos se llevaron las manos a la cabeza, diciendo que nunca deberíamos hacer algo así.

Está claro que la «violencia» genera violencia, y para que quede claro, ni tan si quiera cuando es la última solución, aplico tal táctica.

Pero yendo en bicicleta por la carretera, sobre todo en entornos urbanos, suelen ocurrir, llamémoslo «cosas», con algunos conductores, cuya única salida es golpear su coche.

Cuando veas los dos vídeos más abajo de @righttobikeit, entenderás porqué decide golpear el coche que intenta adelantarle indebidamente.

En mi caso no lo pude grabar, pero como bien explico en el artículo, no había otra salida.

Todavía hay quien se pregunta porque la gran mayoría de ciclistas desearían tener carriles bici protegidos del tráfico motorizado

Un coche intentó adelantarme donde no había espacio material, tenía una fila de coches aparcados a mi derecha y el psicópata al volante a la izquierda, con su espejo retrovisor a 5 centímetros de mi trasero.

El manillar no iba a soltarlo, pues la cosa podía acabar aún peor, así que le me lo quité de encima con cuatro coces. Si no lo hubiese hecho, posiblemente la cosa no habría terminado bien.

Los atropellos a ciclistas son más comunes de lo que imaginamos, y en muchas ocasiones son por malas prácticas de los conductores, como estos dos vídeos que vas a ver a continuación.

¿Has vivido alguna situación similar circulando con tu bicicleta por la carretera?

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