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¿Cómo es posible caerse así de este tipo de rodillo de entrenamiento?

El ciclista tenía todo asegurado, en principio, para que no ocurriese nada. Pero ocurrió lo peor que podía pasar entrenado en bicicleta de carretera con el rodillo de entrenamiento.

Mira que hemos visto caídas en bicicleta con rodillos de entrenamiento, pero como la de este ciclista nunca.

La mayoría de caídas entrenando sobre un rodillo suelen ocurrir cuando este es el típico de rulos.

En este caso el ciclista parece que utiliza un rodillo magnético común, el cual tiene una buena base con dos soportes en forma de triángulo donde se ancla y eleva la rueda trasera.

Hasta ahí todo correcto, pero ¿cómo ocurre la caída?

¿Cómo se puede caer un ciclista de un rodillo de entrenamiento que no es de rulos?

Quitando la parte de grabarse en el rodillo, que allá cada cual, vemos que el ciclista ha colocado la cámara a cierta distancia.

Ahora viene la segunda parte, el lugar donde ha colocado el rodillo.

Parece estar en una terraza al aire libre. ¡Bien!, pues todos sabemos lo angustioso que es hacer rodillo encerrado en casa.

Lo que ocurre, y nunca debemos hacer (a tenor del vídeo ni tan si quiera con este tipo de rodillos seguros), es colocarnos en un lugar, primero, donde no tengamos una pared donde apoyarnos en caso de…

Eso lo tiene este ciclista, pero, ¿y al otro lado?. En principio al otro lado nada, o almenos no lo que tiene este ciclista.

Al otro lado, creyendo que nada pasaría, tiene un auténtico precipicio lleno de duros y angulosos escalones.

La rueda trasera se desengancha del rodillo en la primera pedalada y el ciclista cae por las escaleras de cabeza

Montar con casco en rodillo, salvo que queramos mucho realismo, no es lo más común del mundo, pero quizás después de ver el vídeo comencemos a planteárnoslo.

No se sabe muy bien cómo ni porqué, la rueda trasera de la bicicleta de carretera se desengancha del rodillo en la primera pedalada, esta toca el suelo, las zapatillas calada en los pedales hacen el resto.

El resultado, un lomazo de mucho cuidado por fallar el anclaje o no apretarlo adecuadamente, y segundo, por colocar el rodillo en lo alto de un «precipicio».