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Ciclistas, conductores, patinetes, peatones… ¿Alguien respeta las normas en una gran ciudad?

Se suponía que lo ocurrido nos iba a unir más, íbamos a ser mejores personas, que las cosas iban a cambiar... Pero da la impresión de que incluso las cosas no solo no han mejorado, sino que van peor. - En la imagen un ciclista urbano madrileño montando en bici por la cera, sin casco, mirando el teléfono móvil...

Por suerte, desde que comenzó el estado de alarma en Marzo, solo he tenido que ir dos veces a la capital, y en concreto al centro de esta.

Una fue a finales de Junio, y la última ayer mismo.

En ambos días, y en un trayecto que no superó ni los 10 minutos por dentro del anillo de la M30, vi al menos unos 30 o 40 ciclistas urbanos de diferente «tipo».

Desde usuarios de Bicimad, repartidores de comida a domicilio, mujeres, hombres, jóvenes y no tan jóvenes, y hasta dos personas diferentes vestidas de lycra con toda la indumentaria ciclista.

Bien, pongamos que, para tirar a la baja, la cifra exacta de ciclistas que pude observar fue de 30 en total.

¿Cuántos crees que circulaban correctamente?

Seguramente te hayas acercado mucho a la cifra, y si mis dotes como vidente no fallan, habrás pensado que los 30 ciclistas circulaban incorrectamente.

No andabas lejos, pero todos todos, no fueron.

De los 30 ciclistas urbanos, 25 se saltaron a la torera alguna norma de tráfico o circulación sin miramientos.

Las más comunes, los semáforos, a los que algunos hacían como que paraban, miraban a los lados que no pasase ningún coche y continuaban su marcha en bicicleta.

La segunda más común, ir por la acera pedaleando, junto con la de cruzar los pasos de cebra montado en bicicleta.

¿Casco?, ¿qué es un casco?

Ya se que en Madrid y en muchas ciudades no es obligatorio, pero visto como está el tema con los atropellos y las caídas, no llevarlo es jugar doblemente a la ruleta rusa.

Y costando dos duros como cuestan hoy en día, no hay excusa para no usarlo.

Partiendo de que, por más que cuatro gatos (yo les llamaría más bien ratas de ciudad, como al resto de humanoides que residen en las grandes ciudades), quieran hacernos creer que Madrid está preparada para circular en bicicleta, no es cierto.

Ni está preparada ni la quieren preparar. Todos sabemos los beneficios para el ciudadano que trae consigo el uso de la bicicleta como medio de transporte, pero ellos saben que esos beneficios no llenarán sus bolsillos ni los de sus amigos.

Falta de educación, lo peligroso que es ir entre los coches incluso en las famosas calles «30» (a.k.a. Timocarriles), donde los coches te pasan rozando a más de 70 km/h, la contaminación al respirar el humo directo de los tubos de escape de coches, furgonetas, camiones y autobuses, .la falta total de infraestructuras ciclistas seguras, y un largo etcétera…

¿Qué solución hay?

Pues como digo, puedo ser vidente, pero no soy dios.

La primera solución sería tener carriles bici segregados, seguros y conectados, donde la bicicleta fuese la protagonista, y no carriles bici de cualquier tipo, la mayoría pintados sobre el asfalto y en el espacio cedido por coches y peatones.

Si se quiere que la bicicleta triunfe en una ciudad, se debe pensar la ciudad para que la bicicleta sea el principal medio de transporte, y no el último de la pirámide.

¿Carnet y seguro obligatorio?

El seguro ciclista, ya se ha dicho mil y una veces que la mayoría de personas que cuentan con seguro de hogar, este normalmente le cubre los accidentes en la vía pública.

Una recomendación más que solución, es que si vas a circular mucho por la ciudad en bici, es conveniente que revises este tema y si no tienes seguro te saques uno, más que nada para curarte en salud.

Un atropello a un peatón (son bastante comunes aunque no lo creas) aunque este cruce indebidamente, o un golpe con otro vehículo, puede terminar en cuantiosas cantidades de dinero y quebraderos de cabeza de abogados, juicios, reparaciones e indemnizaciones.

Y el carnet, pues que quieres que te diga, visto lo que ocurre en las redes sociales cada vez que una autoridad publica algo sobre los ciclistas, tener el carnet de conducir no supone ni que sepas conducir ni que te conozcas la normativa de circulación. Y esto es un problema serio sobre todo por los que van al volante.

Grandes ciudades como Londres o París han apostado en los últimos meses por la bicicleta dándoles el espacio que necesitan y quitándoselo al coche. Madrid no ha hecho absolutamente nada, y eso se deja notar.

Tanto es así, que como he dicho, dos veces y circulando unos 10 minutos por el centro, me pareció que había más coches y más atascos en los semáforos y grandes avenidas que antes del estado de alarma.

Y sí, había alguna bici más en general, pero pocas circulando correctamente.

Y la moraleja, a modo de reflexión general, no es el problema en si de los ciclistas urbanos o patinetes eléctricos. El problema general o la percepción que tuve, es que la gran mayoría de las «ratas de ciudad» no respeta nada: peatones, ciclistas, patinetes, conductores, autobuseros, repartidores, etc…

Una falta de empatía o sentimiento de culpa total.

¿Ejemplos de esto?

Personas cruzando a pie por cualquier lado, coches, camiones y furgonetas en doble fila, saltándose los semáforos cuando hay atascos (atascos que forman ellos mismos por esta razón), bicicletas y patinetes por las aceras y sin respetar las normas de tráfico, y cualquier otra actividad poco cívica que se te ocurra.

Si, puede resultar todo muy pesimista, pero…, no hay peros, es la triste realidad.

¿Si una pandemia mundial no ha cambiado prácticamente nada, que crees que podrá hacerlo?

Como siempre, si has llegado a leer hasta aquí, eres merecedor de saber que si tu respetas las normas, en este caso viales, no debes incluirte en el mismo saco.