El ciclismo profesional se ha convertido en algo tan extenso y heterogéneo, que es prácticamente imposible agrupar en un mismo saco a todas o incluso a unas pocas categorías y disciplinas existentes.
En pocos años, el ciclismo, en todas sus vertientes, se ha especializado de tal forma, que en lo único que se asemeja una disciplina ciclista de otra, es que en la bicicleta tiene ruedas y pedales, y aún así, estos son también totalmente diferentes.
Por eso, al hablar de pesos de bicicletas, como ya hemos visto, y siempre hablando de competición, los pesos pueden ir desde poco más de 7 kilogramos hasta los más de 20 kg.
Entre bambalinas se habla muchas veces de cuanto más pesada la bicicleta mejor
Si nos centramos en las más pesadas de todas, las de descenso (sin contar con las bicicletas eléctricas), en la loca carrera por bajar unos cientos de gramos cada año, se ha llegado a un punto de inflexión.
Este punto es sin duda en donde la gráfica de la ligereza del material, por poco o mucho que baje más, ya no se reflejará en una mejora en el tiempo del ciclista en meta.
Y no solo el tiempo, si los pesos siguen bajando, la resistencia del material, la durabilidad, la estabilidad de la bicicleta la rigidez y hasta el funcionamiento de las suspensiones se ven todos ellos afectados por la extrema ligereza de los materiales y diseños.
Aunque esta regla no siempre se cumple, pues hay circuitos, bajadas o senderos donde una bicicleta de descenso superligera se desenvuelve como pez en el agua, en otros, esa ligereza se paga, y muy cara.
La clave está en un peso medio, en el equilibrio, y en aligerar o añadir peso cuando sea necesario
Son profesionales, un aunque sin mucho tiempo, si dedican parte de él a probar todo tipo de material, de medidas, y como no, de pesos.
Algunos optan por meter el peso en el eje eje de pedalier, la zona más centrada y pegada al suelo.
Otros bajo el protector de goma del tubo diagonal, y otros, sin importarles demasiado si la bicicleta o los componentes son de aluminio o carbono.
¿Veremos bicicletas con kit de pesos de serie en el futuro?
Si la fiebre del peso está llegando a límites incalculables en los últimos años, con locuras de muchos ciclistas aficionados gastándose miles de euros en cambiar componentes de sus bicicletas para ahorrarse 200 gramos, basta que se ponga de moda comprar bicicletas con kits de pesos incluidos, para que esta nueva moda comience a cuajar.
Y no es ninguna locura. Si los mecánicos profesionales añaden o quitan peso de la zonas centrales y bajas de las bicicletas de sus corredores, ¿por qué no pulir los detalles mas rudimentarios y llevarlo a producción?
Las bicicletas con kits de pesos incluidos sería la nueva revolución del ciclismo.