El pasado 16 de mayo de 2021, la ciclista veterana Gwen Inglis, perdía la vida cuando un conductor se la llevó por delante entrenando por un carril bici cerca de su domicilio.
El conductor, Ryan Montoya, conducía bajo los efectos del alcohol cuando arrolló a inglis, que entrenaba junto a su marido en bicicleta de carretera.
Montoya, además, ya había sido condenado en 2014 por conducir bebido, y solo 10 días de atropellar a Gwen Inglis, recibió otra condena por el mismo motivo.
Un conductor reincidente que quitó la vida de una ciclista inocente de 46 años de edad.
El conductor ya había sido condenado por el atropello mortal de Gwen Inglis a 8 años de prisión, pero la acusación no había quedado contenta
El pasado mes de mayo de 2022, Ryan Montoya fue sentenciado por causar la muerte de la ciclista a 8 años de prisión.
El marido de Gwin, Michael Inglis, junto con los abogados de la familia, lucharon por una condena superior a la establecida.
Al no conseguirlas, finalmente ha podido recibir una indemnización millonaria por la pérdida del familiar y los daños causados a la familia.
En total, la familia recibirá 353 millones de dólares por el atropello mortal de la ciclista Gwen Inglis.
Pero según estableció el jurado, gran parte de ese dinero deberá ir destinado a concienciar a otros conductores a no manejar sus vehículos bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Esta parte del dinero asciende a 250 millones de dólares.
El resto de los más de 100 millones de la indemnización será para la familia Inglis.