Columbia Vidaraid consigue la victoria tras 125 horas de lucha y un final de infarto. Parecía imposible vencer al mejor equipo del mundo de carreras de aventura, el neozelandés Seagate; de hecho, nadie lo había hecho en los últimos años.
Pero eso, sólo parecía; porque en frente se encontró con Columbia Vidaraid, un equipo con ambición, muy bien preparado para la prueba y con ganas de trabajar duro para llevarse el título.
La carrera comenzó según lo esperado, los neozelandeses cogieron el liderato y empezaron a marcar diferencias; pero al llegar la primera noche comenzaron las sorpresas.
Seagate se perdió en medio de la mata atlántica y Columbia Vidaraid se puso por delante.
El equipo formado por la brasiliense Bárbara Bomfim, el paulista Marco Amselem y los getxotarras Jon Ander Arambalza y Urtzi Iglesias, consiguió aumentar la ventaja conquistada esa primera noche a lo largo de los 600km de recorrido, nadando, remando, a pie y en mtb.
Para esta última modalidad, el equipo rodaba sobre sus Giant XTC 29er, unas bicis idóneas para el terreno rápido y quebrado que se encontraban por el camino, a pesar de la dificultad del barro acumulado debido a las lluvias.
Pero el final de la prueba vendría lleno de emoción. La insistencia de los kiwis y la mala suerte de los hispano brasileiros al tener que parar a la entrada de un río con rápidos de noche por la nula visibilidad, hizo que la distancia se recortase hasta tal punto en que el resultado podría virar completamente en la última sección de kayak.
Pero finalmente no fue así, y Columbia Vidaraid cruzó la línea de meta con una ventaja de 1h28min sobre Seagate y algo más de 4h sobre el equipo brasiliense BMS.
Columbia Vidaraid logra, de esta forma, el pase directo para el mundial de carreras de aventura, que se disputará en diciembre en Costa Rica.
