Todos los que nos hemos enfrentado al reto de elegir la bicicleta más apropiada para un niño, ya sea nuestro hijo, sobrino, hijo de un amigo etc. sabemos que siempre nos asaltan la mismas dudas ¿Le valdrá? ¿Se le quedará pequeña demasiado rápido? ¿Quizás me esté pasando y le quede tan grande que no la pueda usar? ¿Esto con dos ruedas cuánto le aguantará?
Orbea se ha puesto en nuestra piel y junto a su equipo de diseño y de ingenieros ha desarrollado una gama de bicicletas especialmente adaptadas a las necesidades de cada niño.
Estamos hablando de la familia de bicicletas GROW. Bicicletas que han tenido en consideración que deben de estar al servicio del niño, para facilitarle en todo lo posible su aprendizaje y perfeccionamiento a la hora de dar pedales y que como él, crezcan para poder ampliar la vida útil de la bicicleta.
La familia Grow se divide en tres modelos Grow 0, Grow 1 y Grow 2 cada una enfocado y adaptado a un rango de edad-estatura
Son bicicletas con una gran cantidad de detalles sorprendentes, es como si los ingenieros de Orbea hayan vuelto a sus “tiernas infancias” para aprender a pedalear de nuevo. Nada esta puesto al azar, todo tiene su función para facilitar las diferentes transiciones por las que hemos pasado todos a la hora de soltarnos sobre la bicicleta.
Una de las primeras cosas que te das cuenta al ver estas bicicletas es que no son juguetes, muchos adquirimos bicicletas en centros comerciales o jugueterías fijándonos solo en el precio y al final lo que tenemos es una seudo bici de “cartón piedra” que rápidamente quedará en un trastero debido a las numerosas averías que han sufrido.
Para los más pequeños y “destructores de la familia”
La primera premisa que debe tener una bicicleta para un niño es que debe de ser robusta, debido a los numerosos golpes que se va a llevar y al “maltrato” sistemático al que le van a someter sus “cuidadosos” jinetes.
La Grow 0 es una bicicleta sin pedales pensada para introducir a los más “peques” en el mundo de la bicicleta de forma natural. Sin darse cuenta irán cogiendo soltura e irán desarrollando el equilibrio necesario para poder mantenerse sobre una bicicleta. Es increíble ver con que velocidad comienzan a desenvolverse con fluidez con esta bicicleta.
Esta pensada para un rango de edad de 2 a 4 años, para niños con una altura que va de los 85 a 105 cm. Es una bicicleta como hemos dicho anteriormente robusta, con una tubería de aluminio que la hace muy ligera, cosa que se agradece tanto para que el niño pueda controlarla fácilmente, como para los padres cuando toca ir de “Sherpa” y cargar con ella. La geometría ha sido pensada para ofrecer la mayor estabilidad posible, el centro de gravedad se sitúa lo más bajó posible gracias a la posición más elevada de la potencia y un sillín que se puede bajar más de lo normal. Con esto se consigue que el niño se sienta seguro y que además tenga un control total sobre la bicicleta. El manillar es ancho, lo que proporciona una mejor capacidad de giro y las ruedas de 12” con cámaras conseguirán que se deslice con gran facilidad.
Este modelo no incorpora frenos, por lo que se deberá de usar en terrenos llanos, pero la experiencia nos dice que los niños cuando empiezan no tienen suficiente fuerza para accionar un freno y terminan frenando con los pies contra suelo, así que es mejor quitar elementos que realmente entorpecen más que ayudan.
Todos los modelos grow incorporan un limitador de giro del manillar que evita el típico problema de cruzar la rueda por completo y que tantas caídas han generado. Este sistema se puede desbloquear fácilmente cuando veamos que el niño ya “controla “suficiente y necesita ir un paso más allá.
Además el modelo Grow 0 lleva una zona de reposa pies que los niños usan de forma natural cuando cogen suficiente velocidad como para mantenerse en equilibrio. Es increíble la distancia que pueden llegar a recorrer sin poner un pie en tierra.
La Grow 1 es la evolución natural de la Grow 0, está pensada para niños de 3 a 5 años con una estatura que va de 95 a 115 cm. Esta bicicleta ya incorpora pedales, con un único plato y un único piñón, lo suficientemente grande como para que el niño pueda ejecutar la pedalada con fluidez en cualquier terreno.
También incorpora manetas de frenos ergonómicas que se adaptan fácilmente al tamaño de la mano, podremos ajustar la separación de la palanca con una sola llave Allen, y así facilitar el accionamiento de los v-brake que incorpora.
Lo más especial de esta bicicleta al igual que la Grow 2 es el concepto de cuadro extensible. No solo la geometría está pensada para facilitar la adaptación y el equilibro del niños, sino que el propio cuadro se va adaptando al crecimiento del niño gracias a la prolongación del tubo central. Esta acción es muy sencilla tan solo hay que soltar un tornillo pasante y otros dos que se encuentran en la parte superior e inferior del tubo central y podremos hacer más grande el cuadro. Tan solo tendremos que adaptar también la altura del sillín y de la potencia y ¡vualá! Ya tenemos una bicicleta más grande.
Esto conlleva por un lado el considerable ahorro de tener que adquirir antes otra bicicleta y por otro lado conseguiremos que la conducción sea más natural evitando posturas raras sobre la bicicleta. Por eso es tan importante que sea una bicicleta tan robusta y de calidad, porque estará a su lado por mucho tiempo.
Pero todo tiene un límite y cuando ya nuestros pequeños ciclistas, dejan de ser tan pequeños, pero todavía no llegan a una bicicleta normal, nos encontramos en tierra de nadie y probablemente sea la época más complicada para elegir la bicicleta correcta. Para esta época Orbea a diseñado la Grow 2 en dos versiones la Grow 2 1V (con una sola velocidad) y la Grow 2 7V (con 7 velocidades)
Nuestros ciclistas han probado la segunda versión, ya que al ser una transición a una bicicleta mayor veíamos que era interesante que pudieran ya ir practicando a cambiar con una sola maneta. Sinceramente pensábamos que les iba a costar más hacerse a este cambio, pero nada más lejos de la realidad. Al ellos ver que ahora ya podían subir cuestas mucho más empinadas e incluso adaptarse al ritmo de los mayores con más facilidad enseguida le pillaron el tranquilo a los cambios.
La Grow 2 está pensada para niños de 5 a 9 años con una estatura que va de los 95 a 135 cm. Este modelo ya incorpora unas ruedas de 20” y al igual que en la Grow 1 tanto el cuadro como la potencia y la altura del sillín se irán adaptando a la altura del niño gracias al Grow System desarrollado por Orbea.
Con esta bicicleta ya podrán comenzar a aventurarse por caminos más complejos y hacer rutas de mayor duración junto a nosotros, lo cual es una gozada poder compartir esta actividad de una forma ya casi de igual a igual.
En el diseño de este cuadro Orbea ha puesto mucho énfasis en continuar preservando la estabilidad del niño, la zona del eje de pedalier se encuentra más baja de lo normal para conseguir un centro de gravedad más cercano al suelo. Además la disposición de los tubos facilitan al niño el poder subirse, bajarse y el arrancar a pedalear en la bicicleta.
El modelo 7V incorpora el tema de los cambios, pero estratégicamente solo para la parte trasera. Como hemos dicho tiene que ser una evolución natural y progresiva, ponerle a un niño además de los frenos, dos palancas más lo único que conseguirá será entorpecerle. Con solo un plato y 7 piñones tiene más que de sobra para enfrentarse a una gran cantidad de caminos. Con los niños nuestra experiencia nos dice que en la simplicidad está el éxito y de verdad que esta bicicleta es todo un acierto, tanto en diseño, como ergonomía como en usabilidad. Los niños se han adaptado a ella a las mil maravillas.
Los tres modelos de Grow está claro que están pensados para alargar su vida útil todo lo posible y esto tanto para la economía familiar como para la propia comodidad del niño se agradece, además la calidad de los materiales es tal, que la bicicleta pasará de hermano a hermano o a primos y de primos a amigos durante mucho tiempo.
Más información: https://www.orbea.com/es-es/marcas/grow/
